Kane y el guion de un nuevo drama

DEPORTES

Laurence Griffiths | EFE

12 jul 2021 . Actualizado a las 00:14 h.

Entre los grandes logros de la historia de Inglaterra, en un lugar destacado, está cuando por el año 2005 consiguieron hacer creer al mundo —y a ellos mismos, que eso es lo más grave— que Peter Crouch (delantero de más de dos metros) era el líder y goleador que necesitaba su selección para dejar de dar pena. Coitadiños. Jugó 42 partidos con los Three Lions y marcó 22 goles. También dos mundiales en los que Inglaterra dio pena.

Harry Kane también es delantero y alto. 19 centímetros menos que Crouch, pero alto. Y sabe jugar al fútbol. Este sí. Siendo el 9, lideró a su selección durante los estupendos 25 primeros minutos de partido de Inglaterra haciendo de todo. Quizás Kane no sea tan guapo como era (y es, qué tío) Beckham, pero en ese mismo vestuario también los hay más feos y le da mil vueltas como futbolista. A las niñas de ascendencia india del 2021 a las que sus padres no les dejen jugar al fútbol —ojalá esto sea solo ficción— les irá mejor si quieren ser como Kane.

Por supuesto, con Kane, con una selección llena de talento y con todo de cara para ganar su Eurocopa, Inglaterra volvió a dar pena. De la de verdad. Perdiendo en la tanda de penaltis. Inglaterra siempre se decepciona a lo grande, era de suponer. Había soñado a Insigne marcando el gol decisivo y señalándose al Maradona que tiene tatuado, pero perder en los penaltis tenía más sentido.

Se acabó la Eurocopa y la Operación Camarón para los españoles. Empieza la operación camarón para los jugadores ingleses con sus vacaciones al sol y sin untarse protección. Allí les espera Crouch en chanclas.