Italia exigirá lo mejor de España

Javier Lavandeira EUROCOPA 2021

DEPORTES

Kiko Huesca

05 jul 2021 . Actualizado a las 19:46 h.

Somos muchos, entre los que me incluyo, que no apostábamos por encontrarnos ante una situación así, la posibilidad de volver a jugar una final europea.

Nos esperábamos una selección de transición en la que veríamos algunas cosas que valdrían para el futuro, a las que habría que darles tiempo y forma, con el objetivo de conseguir éxitos futuros, y a la que no se le podía exigir rendimiento inmediato, por la juventud de los futbolistas que la componen. Sin embargo, esta selección ha dado la cara, ha sabido sobreponerse a situaciones hostiles y ha sido capaz de enganchar a una afición totalmente desmotivada.

Hay muchas circustancias que nos han llevado a poder jugar esta semifinal:

1-El grupo en el que nos encuadramos. Ayudó a que España pudiese ir de menos a más, con un grado de exigencia medio.

2-Los rivales de las eliminatorias. Se adecuaban al juego de España, eran adversarios abiertos, con gusto por el juego con balón y rivales que trataron de jugar y dejar jugar.

3-La eficacia española. España ha encajado más de lo que nos hubiera gustado, pero también ha anotado más de lo que hubiésemos pensado.

4-La fe en una idea de juego, en un sistema y en un posicionamiento defensivo agresivo, con recuperación inmediata en campo contrario, lo que hace tener claros los mecanismos y automatismos a la hora de atacar, pero también al defender.

5-Una columna vertebral del equipo (Unai, Busquets, Pedri y Morata) alrededor de la que han alternado futbolistas de características diferentes, según las necesidades del partido, rival y el propio equipo.

¿Qué nos vamos a encontrar contra Italia? Lo primero, una selección que le gusta controlar los partidos a través del balón, que tiene futbolistas muy difíciles de neutralizar (como Immobile o Insigne), un equipo en mayúsculas, que trabaja con gran solidaridad en ataque (ayudas ofensivas constantes) y con gran solidaridad

en defensa (presión inmediata tras pérdida, con ritmo de juego defensivo intenso), una genial interpretación en las transiciones ofensivas para ocupar espacios, y una intensidad altísima en las transiciones defensivas, que persigue recuperar muy pronto y volver a atacar, siempre manifestando verticalidad, atacando en duelos individuales, asociaciones de 2 contra 1 en banda y generando juego grupal por dentro, con mucha movilidad, que te obliga a escalonarte continuamente.

¿Y España, qué? Seguramente tendrá que hacer el mayor esfuerzo de la Eurocopa para manejar el partido a través de la pelota, que le será disputada, posiblemente tenga que defender más que nunca, a través de las ayudas defensivas y saber defender posicionalmente, manejar mejor el balón parado ofensivo e imponerse en el defensivo.

Debe volver a la eficacia goleadora del día de Croacia, y ser de nuevo un equipo que genera ocasiones, como en la parte final del partido de Suiza. Necesita la mejor versión Busquets-Pedri para imponerse en la zona de creación-finalización y la mejor versión de Unai-Laporte para defenderse bien, cuando toque hacerlo.

Es la estación última para llegar a una final en la que creo que no partimos de favoritos, y en la que creo que la clave va a ser la rentabilidad de los momentos de dominio con balón, ya que la lucha por hacerse con él, marcará mucho lo que será el devenir del partido.