Pogacar descansa sin rivales a la vista y Mas, a un paso del podio

Carlos de Torres / EFE

DEPORTES

BENOIT TESSIER

El esloveno se distancia ya a 2 minutos del segundo clasificado, Ben O'Connor

05 jul 2021 . Actualizado a las 17:58 h.

El Tour disfrutó del primer día de descanso en los Alpes después de una semana intensa, con fuertes emociones, sobresaltos y caídas que dejaron conclusiones contundentes. El esloveno Tadej Pogacar se ha encargado, con su enorme clase y poderío, de encarrilar su doblete en París; mientras, sus enemigos se resignan a pelearse por la segunda plaza.

¿Está decidido el Tour?. Es el debate que se maneja en una jornada de reposo muy esperada y necesaria. El pelotón está magullado, encogido por el frío y las lluvias. Un ciclista de 22 años, ganador del Tour 2020 en la última jornada, se ha disparado hacia la renovación del título. Pocos lo dudan. Sus rivales lo aceptan. Salvo accidente o lesión, la suerte está echada. «Está a otro nivel».

No obstante, y por hacer honor a la prudencia, Pogacar afirma que aún no ha ganado, que el Tour es el Tour y que aún pueden pasar muchas cosas. Razón tiene, pero a su alrededor hay una especie de solar. Con sus demostraciones en La Colombiere camino del Grand Bornand y en Tignes, la general canta la realidad.

Pogacar luce su maillot amarillo con 2,10 minutos sobre el héroe ganador en Tignes, el australiano Ben O'Connor. La tercera plaza, que ocupa el colombiano Rigoberto Urán ya se aleja a los 5,18. Y en esas marcas siguen el danés revelación Jonas Vingegaard, el ecuatoriano Richard Carapaz y el español Enric Mas, sexto a tan solo 29 segundos de las estancias de honor.

Los esquemas previos a la salida en Brest saltaron pronto por los aires. Una caída en a tercera etapa mermó seriamente a Primoz Roglic, quien terminó retirándose. El mismo accidente redujo al anonimato de Geraint Thomas, Richie Porte y Tao Geoghegan. Ni el Jumbo Visma ni el potente Ineos han podido desplegar su potencial.

Se buscan nombres para dos plazas de podio

Queda mucho Tour, dicen aquellos que ven la vertiente más optimista. Pogacar es humano y puede fallar, o ser víctima de una emboscada, pero, ¿quién puede desbancar al fenómeno del UAE Emirates?; y sobre todo, ¿cómo se consigue eso con el potencial del líder?

De momento hay casi una decena de corredores en el margen de menos de 2 minutos que se van a fajar por acompañar a Pogacar en la foto de París. En ese grupo está el español Enric Mas, sexto a 5,47 del líder y a 29 segundos del tercer puesto de Urán. El mallorquín va en progresión y puede lograr su gran objetivo.

«Pogacar no me tiene comida la moral, se ha mostrado superior, pero cualquiera puede tener un día malo y perder una minutada», se animó Enric Mas desde el hotel de Tignes.

Otros corredores aspiran a lo mismo desde la periferia actual del cajón; el caso de Vingegaard, ahora con los galones del Jumbo tras el hundimiento de Van Aert; del ecuatoriano Carapaz, reducido por Pogacar en sus ataques; de holandés Kilderman y el kazajo Lutsenko.

Entre los españoles, se mantiene al alza Pello Bilbao (Bahrain), un corredor diesel que después del Giro está dispuesto a meterse en el top 10. Es undécimo a 8,38 minutos. Más alejados aparecen el incombustible Jonathan Castroviejo, puesto 21 e Ion Izagirre, segundo en Le Grand Bornand, en el 24.