La oposición del interino Rob Page en el banquillo de Gales

DEPORTES

KOEN VAN WEEL

El seleccionador galés asumió el cargo hace unos meses de manera provisional por la expulsión de Giggs y sin experiencia en banquillos de élite

25 jun 2021 . Actualizado a las 21:01 h.

Cuando Gales sentenció su presencia en la Eurocopa a finales del 2019 Robert Page (Llwynypia, 1974) trabajaba en la sombra. Era un actor secundario que pasaba desapercibido en los créditos de una selección que se proclamó subcampeona de su grupo de clasificación, que compartió con Croacia, Eslovaquia, Hungría y la débil Azerbaiyán. Un año después, el entonces ayudante de Ryan Giggs se encontró en el centro de los focos. Y unos meses más tarde, con la batuta del equipo en una gran competición continental. Un sueño hecho realidad para un entrenador que tomó posesión del cargo de manera provisional y huérfano de experiencia en banquillos de primera línea.

El interino Rob Page lleva algo más de medio año opositando en el banco galés, al que llegó de rebote el pasado mes de noviembre para relevar al que era su jefe y principal valedor, Ryan Giggs, acusado de violencia de género y expulsado de su cargo. La federación buscó el sustituto en casa, en una clara apuesta por la continuidad, y eligió a Page sin reparar en su discreta trayectoria como preparador principal, que se ceñía a clubes de la tercera y la cuarta división británica y las categorías inferiores de la selección del dragón. Como futbolista tampoco presenta un currículo muy brillante. Se retiró en el 2011 después de disputar 550 partidos con el Watford, el Sheffield United, el Cardiff, el Coventry City, el Huddersfield Town y el Chesterfield, y con el mérito de haber sido el único defensa en marcar en las cuatro principales categorías de Inglaterra.

Siete partidos oficiales

Su nombramiento generó debate en el país y sembró dudas que los resultados se encargaron de esfumar. Gales ha ganado cinco de sus siete partidos oficiales con Rob Page como seleccionador. En la Liga de las Naciones se impuso a Irlanda (1-0) y Finlandia (3-1), y en la clasificación para el Mundial de Catar venció por 1-0 a la República Checa y sucumbió (3-1) ante Bélgica. Mientras tanto, en la primera fase de esta Eurocopa solo Italia pudo vencerle (1-0). Un punto ante Suiza (1-1) y tres ante Turquía (2-0) le empujaron a los octavos de final.

Ampadu, baja galesa

Dinamarca le espera en los octavos de final este sábado (18.00 horas, Cuatro). Un rival que pasó del drama al éxtasis como pareja de baile para la eliminatoria de los pequeños soñadores —entre los dos países no alcanzan los 10 millones de habitantes—. «Todos somos ambiciosos y queremos llegar lo más lejos posible, pero no podemos ser ingenuos a la hora de afrontar este partido. Hemos visto jugar a Dinamarca en su último partido y no podemos dejar de estar impresionados por lo que están haciendo. También sabemos que podemos plantear un buen partido contra cualquiera», declaró Rob Page, que debe borrar de sus planes al sancionado Ampadu.

«Nos hemos preparado bien y nos sentimos totalmente listos para todos las dificultades que nos encontremos. En general, estamos muy mentalizados y tenemos muchas ganas de jugar el partido», explicó la víspera del encuentro Kasper Hjulmand, el seleccionador del combinado danés, que se presenta en el pulso con cuatro jugadores apercibidos —Damsgaard, Delaney, Jensen, Wass— y el honor de ser el equipo que más tira a portería (61) y uno de los mejores en la posesión (57,3 %).

Eriksen, bigoleador en la última victoria danesa sobre los dragones en el 2018

Dinamarca aspira a brindar otro triunfo a Christian Eriksen, su estrella herida en el campo de batalla. El centrocampista del Inter de Milán fue, precisamente, el protagonista de la victoria de hace tres años de los daneses sobre los británicos en Aarhus dentro de la Liga de Naciones. El doblete que anotó ese día el por entonces futbolista del Tottenham selló un triunfo (0-2) que la selección que representa al país que alumbró el cuento de ‘La Sirenita’ repitió dos meses después en Cardiff con tantos de Nicolai Jorgensen y Martin Braithwaite, dejando en anecdótica la diana sobre la bocina de Bale, que solo sirvió a los galeses para recortar distancias y salvar el honor.

Para encontrar la última victoria de Gales sobre Dinamarca hay que remontarse a noviembre del 2008, cuando una diana de Craig Bellamy les permitió imponerse al combinado que por entonces dirigía Morten Olsen. Ninguno de los once titulares que formaron aquel día en el bloque derrotado aparece entre los citados por Kasper Hjulmand para esta Eurocopa, pero del bando ganador resisten tres entre los convocados por Rob Page: Chris Gunter, Aaron Ramsey y Gareth Bale.

17 años fuera del cuadro final

Casi dos décadas llevaba el combinado nórdico sin pasar el corte de la primera fase. La anterior ocasión en la que había aparecido en el cuadro final fuera en la Eurocopa de Portugal en el 2014, cuando acabó segundo de grupo por detrás de Suecia dejando sin billete para la siguiente ronda a Italia y Bulgaria. Cuatro años después fue una de las grandes ausencias en el campeonato disputado en Austria y Suiza, y en Polonia y Ucrania (2012) dijo adiós en la fase inicial tras acabar tercero en el grupo de la muerte que completaban Alemania, Portugal y Holanda.