El último tren de Sara Álvarez a Tokio pasa por Budapest

DEPORTES

La yudoca lucense competirá en el mundial de Hungría, la última prueba puntuable para lograr su presencia en los Juegos

10 jun 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

La carrera para los Juegos de Tokio está siendo de fondo para Sara Álvarez (Lugo, 1990). Con una trayectoria marcada por dos graves lesiones en la rodilla, que a punto estuvieron de apartarla definitivamente del tatami, la lucense vive un momento dulce. Sara tendrá la oportunidad en Budapest de disputar la última prueba mundial de yudo que le puede otorgar el billete a las olimpiadas. La gran aspiración de Sara Álvarez.

Los problemas en la pierna la alejaron de intentar estar en los Juegos de Londres y Río. Cuando todo parecía perdido volvió a la carga hasta convertir Tokio en su gran baza. Actualmente se encuentra en el puesto 30 del ránking continental. En el grand slam de Kazán que se celebró a comienzos del mes de mayo, Sara partió en el puesto 34 del ránking en la categoría de más de 78 kilos donde compite. Se quedó a un paso lo pelear por el bronce tras caer en la repesca ante la argelina Sonia Asselah. «Fue un combate muy igualado. De tú a tú. Ella llevaba una sanción por encima, pero al final me entró y me hizo ippon», recuerda.

Tras una semana en Benidorm con la selección española entrenando con los mejores yudocas del mundo, la lucense aprovechó su estancia levantina para seguir preparándose en el Centro de Alto Rendimiento en Valencia. «Aquí no pienso en nada más. Solo es comer, dormir y entrenar. Es una concentración internacional y puedo entrenar con chicas que compiten en mi peso, así que tengo que aprovecharlo», relata. Y es que esa oportunidad es algo impensable cuando trabajaba en Galicia, ya que la falta de yudocas de su peso le obliga a prepararse con hombres. Pero toda preparación es poca si el objetivo es lograr la meta. Y Sara quiere conseguirlo. «En Kazan necesitaba sumar puntos, me salió una buena competición y subí unos puestos. Aún así me lo sigo jugando todo en Budapest», reconoce.

Cada paso que da se va encontrando mejor. En Valencia se volcó en pulir los últimos detalles para acudir al mundial con toda la seguridad. «Me he centrado en entrenar. Esperemos que consiga la plaza», incide la lucense.

El sábado entra en escena

El campeonato arrancó el pasado domingo, pero su turno no llegará hasta el sábado. «Cada jornada compite un peso de chicas y otro de chicos», explica. De ahí saldrá su futuro. Ya le han puesto la vacuna del covid que el Comité Olímpico Español está inoculando a todos aquellos deportistas con plaza asegurada o que está muy próxima a lograrlo. Ese es el caso de Sara. Tras recibir la primera dosis en Valencia, tiene previsto ponerse la segunda a la vuelta del mundial de Hungría en el hospital militar de Ferrol.

La plaza continental

Un total de 386 yudocas se darán cita en los Juegos de Tokio. Por primera vez en una cita olímpica, existe el mismo número de plazas masculinas que femeninas. En total, 18 deportistas por peso, además de una plaza por cuota continental, que es a la que aspira Sara Álvarez.

Para ese último pasaporte para los Juegos, se crea un ránking por continente. Se clasifican los yudocas con mejor puntuación, siempre con un máximo de uno por cada comité nacional en cada categoría de peso. Sara necesita sumar puntos para certificar su presencia en Japón.