Al equipo coruñés, lastrado de nuevo por su bajísimo acierto desde el tiro libre, se le escapa el sueño de la ACB en un partido igualado hasta el final
10 jun 2021 . Actualizado a las 11:58 h.El sueño de alcanzar la Liga ACB se acabó para el Básquet Coruña en Granada. En la ciudad andaluza cayó derrotado con honores en un partido igualado el conjunto coruñés, que tuvo en un intento de triple de Monaghan el partido. Pero el tiro del americano no entró y el Granada jugará la final por el ascenso ante el Breogán —que ganó al Alicante en el Pazo—. La eliminación no empaña la gran temporada del equipo, pero costará digerirlo sabiendo que de meter los tiros libres, el arte más asequible de este deporte, los coruñeses estarían el sábado peleando por un puesto en la élite.
El Leyma volvió a salir a pista atenazado y dubitativo. Enmarañado en la defensa planteada por Pablo Pin, que quiso cerrar los caminos hacia el aro para que el equipo de Sergio García no pudiese hacer eso que tanto le gusta: correr. Está claro que funcionó. Los coruñeses, ante tanto atasco por dentro, optaron por probar por fuera. Y se cansaron de lanzar triples. Con cuatro minutos transcurridos ya habían intentado seis. No metieron ninguno.
Pese a un nivel de acierto bajísimo —el Leyma no es un equipo con especialistas desde la distancia del 6,75—, los naranjas pudieron mantenerse en el partido gracias a su defensa, el arma que siempre les ha permitido competir en los días menos finos. Fue un primer período feo, que tuvo mala pinta por momentos, pero del que el Leyma salió vivo (16-12).
En el segundo cuarto, volvió a faltar temple a los dos equipos. Que entre fallo y fallo se mantenían siempre a tiro de piedra en el marcador. El Leyma, pese a que dominaba el apartado reboteador, seguía siendo un desastre desde el triple —llegó al descanso con un 3 de 18— y a medida que se consumía el segundo cuarto apareció un mal que, por habitual, metió el miedo en el cuerpo a los coruñeses: el equipo empezó a fallar tiros libres. Uno detrás de otro. Cada error era un bloque de cemento en la moral. Por si eso fuese poco, Bropleh, estrella de los granadinos comenzaba a carburar. Había malos síntomas, pero el Leyma estaba muy vivo al llegar al descanso (34-32).
Parcial no aprovechado
El Básquet Coruña parecía otro tras el descanso. Al fin, pudo ponerse a correr. Entre Monaghan y Dago Peña impulsaron un parcial de 2-10 (36-42). Pablo Pin reaccionó juntando en pista a Lluís Costa y Christian Díaz, sus dos talentosos bases nacionales. Y la racha se secó. En parte por el buen hacer de sus dos directores de juego; en parte porque el Básquet Coruña se revolcaba en sus miserias, inmolándose desde la personal. La ventaja, tan pronto como vino, se fue. Un parcial de 8-2 del Granada volvió a poner en ventaja a los locales, que se fueron con una renta de cuatro puntos al último cuarto (51-47).
En el último período el Granada tiró del oficio de jugadores como Fall o Costa. Y los nazaríes golpeaban duro a los riñones del Leyma. Llegaron a disponer de ocho puntos de renta a falta de poco menos de cinco minutos. Parecía el final. Pero el Básquet Coruña se agarra a los partidos como nadie. Y remontó, impulsado por un salvavidas llamado Dago Peña, para llegar vivo a la última posesión. Se la jugó Monaghan con un triple que no entró y el equipo se despertó del sueño, agitado por sus números. Ganar un partido anotando 14 de 28 tiros libres (un 50 %) es complicado. Llegar a la ACB, imposible.