Japón pone en duda sus Juegos

DEPORTES

franck robichon

La evolución de la pandemia en el país, la baja tasa de vacunación y un creciente rechazo social aumentan el debate interno a solo dos meses de la celebración

17 may 2021 . Actualizado a las 08:47 h.

A solo 67 días de la ceremonia de Apertura, prevista para el 23 de julio en el estadio Olímpico de Tokio, la controversia sobre la celebración de los Juegos sacude a Japón. El país sigue inmerso en la lucha contra la pandemia del covid, que ha alcanzado en los últimos días máximos históricos en contagios. Pese a que el comité organizador anunció el pasado viernes su intención de reducir a la mitad los extranjeros que llegarían a Japón con los Juegos, de los 180.000 previstos cuando se aplazaron a 90.000, la oposición social sigue en aumento y ha tumbado los índices de popularidad del primer ministro, Yoshihide Suga.

Cuarta ola: Una gran parte del país está en estado de emergencia

La propagación del covid ha alcanzado niveles récord en algunas regiones japonesas a dos meses y medio de los Juegos. Desde ayer el gobierno nipón incluyó a las prefecturas de Hokkaido, Okayama e Hiroshima en el estado de emergencia que ya está vigente hasta el 31 de mayo en otras seis regiones del país: Tokio, Osaka, Kioto, Hyogo, Aichi y Fukuoka. La propagación de cepas más contagiosas empeoró la situación en las últimas semanas, lo que ha elevado la incertidumbre sobre la oportunidad de la cita olímpica.

Vacunación: Solo alcanza al 4 % de la población, a la cola de la OCDE

El dato es cuanto menos sorprendente en uno de los países más ricos y avanzados del mundo. Los reguladores japoneses se han tomado el proceso de vacunación con cautela. Solo han autorizado una vacuna, la de Pfizer, y Japón presenta a día de hoy el índice más bajo en dispensación de los 37 países que conforman la OCDE. La presión pública ha hecho que el primer ministro se comprometiese públicamente a administrar un millón de vacunas diarias, aunque no ha aclarado a partir de cuándo.

Sanitarios: Los médicos le piden al gobierno que cancele la cita

El Sindicato Nacional de Médicos japoneses solicitó oficialmente al ejecutivo nipón que suspenda la cita olímpica ante el riesgo de propagación de nuevas cepas. «Para los atletas será duro, pero no es posible que los Juegos sean seguros y el gobierno tiene la importante misión de proteger la vida de los ciudadanos», alegó el portavoz del sindicato, Naoto Ueyama. El colectivo sanitario se posicionó en contra de los Juegos tras filtrarse un plan para desplegar a 10.000 de ellos en la cita olímpica. «El 40 % de los médicos en activo ha superado el límite de horas extra. La carencia de médicos afecta a la vacunación y el gobierno toma la postura de reducirlos con los Juegos Olímpicos», denuncia el colectivo que los engloba.

Municipios: 45 localidades se dan de baja y rechazan ser anfitrionas

Al menos 45 localidades han suspendido los programas previstos como anfitrionas de los equipos de diversos comités nacionales durante las semanas previas a los Juegos, según confirmó la ministra nipona a cargo de la cita olímpica, Tamayo Marukuya. Estos municipios iban a servir como lugar de alojamiento, entrenamiento y aclimatación de los deportistas, para los que también estaban previstos diversos programas culturales. A finales de abril se habían inscrito 528 municipios.

Opinión pública: Seis de cada diez ciudadanos no quieren que se celebren

La presión popular contra los Juegos ha ido en aumento en las últimas fechas. Dos encuestas recientes así lo reflejan. La de TBS News señala que el 65 % de los japoneses quiere que los Juegos se cancelen o se pospongan. En la que realizó el diario Yomiuri Shimbun el pasado fin de semana el porcentaje es del 59 %. A ello hay que sumarle la campaña emprendida a través de la plataforma change.org por Kenji Utsunomiya, el que fue presidente de la federación de abogados del país, y que ha logrado en menos de dos semanas reunir 350.000 firmas que exigen la cancelación de los Juegos.

Las clasificaciones olímpicas siguen con normalidad

Según estimaciones de la televisión pública NHK, en caso de cancelarse los Juegos los contribuyentes nipones verían como se evaporan 34.000 millones de euros entre inversiones ya ejecutadas y el beneficio previsto. El COI también se juega lo suyo. Los derechos audiovisuales comprometidos para los Juegos de Tokio suponen el 73 % de su presuesto anual. El diario francés Libération se preguntaba en portada esta semana si los Juegos estaban ko. The New York Times ha dedicado varios editoriales a pedir que la cita olímpica de Tokio sea replanteada.

Mientras, la clasificación en las diferentes disciplinas olímpicas transcurre sin sobresaltos. El compromiso es que todos los participantes lleguen a Tokio vacunados. Las voces críticas de los deportistas, entre las que destacó la de la tenista Serena Williams, que se había mostrado dispuesta en una entrevista a renunciar a su presencia en Tokio si no podía llevarse con ella con tranquilidad a su hija de 3 años, se han ido acallando según se ha ido aproximando la cita.

Solo renunció Corea del Norte

De todos los países convocados, solo uno anunció hasta la fecha su intención de no participar: Corea del Norte, el régimen de Kim Jong-un anunciaba públicamente a principios del pasado mes de abril su decisión de no desplazar a su delegación a tierras niponas. Una baja que no perturba la celebración de los Juegos.

Desde el COI siguen con atención la evolución mundial de la vacunación. El camino hacia la inmunidad global presenta registros desiguales. Más de 693 millones de personas han recibido al menos una dosis. La vacunación está especialmente extendida en Norteamérica. Una de cada dos personas habían recibido allí al menos una dosis la pasada semana. En la Unión Europea son una de cada cuatro. El ritmo es menor en América del Sur, Asia y, sobre todo, África.