En los últimos apartados del comunicado, los tres clubes fundadores que no han anunciado su salida de la Superliga, reconocen que son «plenamente conscientes de la diversidad de reacciones» que ha provocado el anuncio y «la necesidad de reflexionar» sobre ello, por lo que están abiertos a «reconsiderar el planteamiento propuesto en lo que resulte necesario». Sin embargo, piensan que sería «una grave irresponsabilidad» abandonar su «misión de aportar soluciones eficaces y sostenibles y respuestas a las cuestiones que amenazan al fútbol».
Lamentan «profundamente» la situación de los nueve clubes que anunciaron su salida de la Superliga, «inmersos en una postura incoherente -e inconsistente- tras asumir en el día de ayer ciertos compromisos con UEFA». Y reiteran a FIFA, UEFA y todos los actores del fútbol, su «compromiso y firme voluntad de debatir, desde el debido respeto, sin presiones del todo intolerables y con respeto al estado de Derecho, las soluciones más apropiadas para la sostenibilidad de toda la familia del fútbol».