Zverev machaca a Nadal

La VozEnric Gardiner COLPISA

DEPORTES

Rodrigo Jiménez

El balear cae en Madrid ante el alemán y ya son tres Masters 1.000 en tierra sin pasar de cuartos de final

07 may 2021 . Actualizado a las 18:17 h.

La ronda maldita de Rafa Nadal en el último año volvió a encasquillarse para el balear. Los cuartos de final, antes un trámite, ahora son un escollo insalvable para Nadal, que ha perdido en esta ronda en los últimos tres Masters 1.000 que ha disputado. Alexander Zverev, campeón en Madrid en el 2018, logró su mejor triunfo de los últimos tiempos, y batió al español para ganarse el pase a semifinales. En una hora y 44 minutos, Zverev destruyó a Nadal con 28 golpes ganadores en una pista Manolo Santana enmudecida ante la superioridad del germano (6-4 y 6-4).

Nadal estuvo muy cándido, demasiado blando con la derecha y lo pagó. Solo seis golpes ganadores y una factura de 17 errores no forzados dilapidaron las opciones del balear, que seguirá sin llevarse el trofeo dorado desde 2017, la última edición en la que tocó metal. Y eso que su inicio prometió otra avalancha de juego como ante Carlos Alcaraz y Alexei Popyrin en las rondas previas. Nadal, que siempre había ganado a Zverev en arcilla, empezó dominando en el marcador por 4-2, una ventaja suculenta que desaprovechó en un juego horrible al saque. «Fue un desastre. A la hora de la verdad lo he hecho todo mal», reconoció el manacorense.

Con Zverev aún por detrás, con 4-3, el español falló un punto que pudo ser decisivo. Una derecha desde el fondo que se enganchó en la red y que supuso que Nadal no rompiera y se pusiera 5-3 arriba. Zverev aguantó, puso el 4-4 y se llevó los dos siguientes juegos ante un Nadal magullado, consciente de que sus errores le habían costado el set, y al que el huracán del alemán se llevó por delante. «A veces gano sets cuando soy inferior que el rival. Hoy no ha sido así. He tenido errores injustificables», afirmó.

Pese a su habitual nerviosismo al servicio, que le hace cometer un torrente de dobles faltas, Zverev se tranquilizó con la ventaja en el marcador. Solo hizo una doble en el segundo parcial y abatió a Nadal con contundencia. No dio ni un signo de debilidad. No concedió ni una pelota de rotura. Hizo que sus 25 errores no forzados parecieran un mero peaje hacia el triunfo. «Con la velocidad de la pista, es difícil tener confianza. El servicio era difícil de controlar», apuntó.

No hubo mucho más que hacer. Zverev no abrió ninguna puerta con su servicio, quebró una vez el de Nadal y se hizo con su triunfo más importante del año y con el acceso a sus segundas semifinales de la temporada, tras las de Acapulco, donde ganó el título. Es su tercera victoria consecutiva contra Nadal, ante el que no pierde desde Roma 2018. «Tengo sensaciones negativas porque es una semana importante para mí. Son las condiciones más complicadas de toda la gira de tierra, pero siempre es una semana que me hace muchísima ilusión. Al perder las sensaciones son negativas. Cuando uno sube una escalera puede haber un paso atrás y es lo que ha pasado hoy», reconoció Nadal.

Ahora el balear encara Roma, el último torneo antes de la llegada a Roland Garros, con el objetivo de recuperar el número dos del mundo que perderá el lunes en favor de Daniil Medvedev. El ruso le pasará en clasificación al no poder igualar Nadal las semifinales que logró en Madrid en el 2019. De no arrebatárselo de nuevo en Roma, podría haber un temprano enfrentamiento en semifinales con Novak Djokovic en París. «Me voy de Madrid con sensaciones buenas en general, pero con una sensación fea de jugar un mal partido hoy», apostilló Nadal.