Del fondo del mar a la canasta

L. Balado

DEPORTES

El jugador de baloncesto Carlos Martínez impulsa un proyecto de economía circular que recicla residuos en redes de canastas

04 may 2021 . Actualizado a las 17:40 h.

Carlos Martínez (A Coruña, 1996) forma parte de una generación a la que, por pura supervivencia de la especie, le grabaron a fuego desde pequeño aquello de las tres erres (reducir, reutilizar y reciclar). Y es esperanzador ver cómo la semilla germina. Por supuesto, lo hace en lo suyo, que es el baloncesto, como también lo es Galicia. El jugador, ex del Leyma y ahora internacional español absoluto de 3x3, es el ideólogo del proyecto Ecoballution, una idea que se cuelga del aro.

«En verano estuve con el baloncesto mucho tiempo en la cabeza, pensando en proyectos y dándole vueltas a ideas. Sabía que las redeiras elaboran, con diferentes materiales, productos artesanales para tener otros ingresos y no solo depender de las redes de pesca. Se me ocurrió poder dar una segunda vida a redes ya estropeadas, poder restaurarlas y convertirlas en canastas de baloncesto», explica Carlos. Tan sencillo como eso, dar una segunda vida a desperdicios que, según cuenta: «En el mejor de los casos están en un basurero y en el peor en el fondo del mar»

De Corme a la Liga Endesa

Así nació este proyecto personal basado en la economía circular y que ha gustado también en la Liga Endesa. Su proyecto es uno de los cinco finalistas —tras una criba de entre unas 300 ideas— del concurso de emprendimiento Historias Basket Lover que organiza la Liga y por el que se puede votar a través de este enlace.

Pero para que este boceto empresarial saltase del papel y se hiciese realidad fueron imprescindibles las manos expertas de las mujeres de la asociación de redeiras de Corme. Carlos contactó con ellas a través de una amiga y, rápidamente, se dio cuenta de lo bien organizadas que estaban.

La apuesta por el tejido empresarial local era, junto a hacer un modelo de negocio sostenible, una de las prioridades de Carlos Martínez. «Esto tiene dos aristas sociales. En primer lugar, la del reciclaje, la economía circular y la sostenibilidad; en segundo lugar, la de dar promoción de la economía local, visibilizar el trabajo de las redeiras para que puedan tener otro tipo de ingresos», comenta el coruñés. Su idea es también un vehículo para la reflexión. «Cuando tiras a canasta, si te paras un momento, te da que pensar más que si fuese una red normal»

Sostenibilidad sostenible

Carlos Martínez cree que el futuro pasa por la economía circular, pero con un criterio. «Siempre y cuando la producción del nuevo producto reciclado no contamine más que el propio deshecho. Eso no tendría sentido», recuerda.

«Se tiende a consumir cada vez menos recursos naturales. Vincular esto al deporte y a sus valores creo que hacen un combo muy positivo, educativo y social», remarca asegurando que el proyecto tiene visos de crecer.