Los de Epifanio estuvieron casi todo el partido más de 15 puntos por debajo
30 abr 2021 . Actualizado a las 13:59 h.El Río Breogán cayó por 97-80 en cancha del Covirán Granada en el que fue, seguramente, el peor partido de los lucenses en toda la temporada. Jamás habían recibido más de 90 puntos del rival hasta este sábado. Los granadinos pasaron por encima de los lucenses que no se presentaron al partido como tienen acostumbrados a sus aficionados este año. La mayoría de los pupilos de Diego Epifanio estuvieron absolutamente irreconocibles, fallando tiros abiertos, perdiendo 15 balones y dando una sensación de incapacidad constante durante el encuentro. El Breogán mantiene el liderato de la segunda fase de la LEB Oro, con 11 victorias y 4 derrotas, pero Leyma Coruña y TAU Castelló ya le pisan los talones con una y dos victorias menos, respectivamente.
El partido comenzó con un Breogán que parecía no haber salido del vestuario todavía. En las tres primeras jugadas, los celestes cometieron tres pérdidas, fallaron los tres tiros que lanzaron y se llevaron dos tapones de la defensa nazarí. Un 12-4 de inicio a favor del Granada evidenciaba que los de Diego Epifanio necesitaban entrar en el partido cuanto antes si no querían que los andaluces se fuesen en el marcador ya en los primeros minutos. Casi nueve minutos y cinco intentos tardó el Breogán en encestar su primer triple del partido, obra de Erik Quintela. Aunque parecía que los breoganistas se querían meter en el partido, el primer parcial terminó como empezó: de forma desastrosa. A falta de dos segundos, Soluade le dejó el balón en bandeja a Germán Martínez para que anotase con facilidad en una falta de entendimiento flagrante con su compañero.
No mejoró la situación en el segundo parcial, con el Breo yendo poco a poco a menos y dejando que el Granada acumulase una ventaja de hasta veinte puntos. Un parcial de 15-2 entre el final del primer cuarto y el inicio del segundo evidenciaba que el Breogán estaba disputando sus peores minutos de la temporada. El Breogán intentaba resistir a través del rebote ofensivo, una de sus bazas más importantes durante toda esta segunda fase. Bropleh, Martínez e Iriarte se vistieron de Golden State Warriors, en la primera mitad, ya que solo fallaron un triple de los cinco que lanzaron entre los tres. Al descanso, 43-29 para los granadinos.
Todo el partido a remolque
Parecía que intentaba tirar de la cuerda el Breogán al inicio de la segunda mitad gracias a cuatro canastas seguidas, lo que llegó a reducir la ventaja a menos de diez puntos por primera vez desde los primeros minutos del encuentro. Se resistían los andaluces, que se revolvieron y consiguieron extender de nuevo su ventaja a más de quince puntos. No podía el Breo, y el acierto del Granada les penalizaba demasiado. En lo que esperaban los lucenses que fuese el período de la remontada, se convirtió en un empeoramiento de la pesadilla que estaban viviendo. Los locales sacaron las muñecas a pasear y anotaron 35 puntos en el tercer cuarto, extendiendo todavía más su ventaja hasta los 21 puntos (35-28). Los granadinos rozaban el 65 % en los tiros de campo, mientras que los de Diego Epifanio sufrían para superar el 40 %.
El último cuarto fue un mero trámite para ambos equipos, con el Breogán intentando que la ventaja rival fuese lo menos vergonzante posible y el Granada pensando en su próximo partido y en sus opciones de ascenso, las cuales mantiene gracias a esta gran victoria.