Arévalo se reivindica en el selectivo de cara a Tokio

DEPORTES

CESAR DELGADO

El palista de Betanzos ganó también las dos series de K1 200 metros que cierran el proceso para elegir el K4 500 español

04 ago 2021 . Actualizado a las 23:49 h.

El betanceiro Carlos Arévalo se quedó fuera de los Juegos Olímpicos de Río tan solo por pequeños detalles. Se dejó la vida en un proceso selectivo en el que el laureado Saúl Craviotto (ya entonces con dos medallas en su palmarés) partía con ventaja, y en el que Cristian Toro exhibió un potencial fabuloso. En aquel K1 200 solo cabían dos palistas, y Arévalo se quedó en mayo del 2016 fuera de un barco que, solo unos meses después, ganó el oro en Brasil. Pero siguió machacándose como siempre, a la espera de una oportunidad para reivindicarse. Esa ocasión le llegó en el 2019, paradójicamente, por una renuncia de Toro a acudir al Mundial por el desánimo que le producía entrenar en Trasona (Asturias) lejos de su familia, que continuaba en Madrid.

La baja de Toro permitió a Arévalo integrar contrarreloj un K4 500 junto a Saúl Craviotto, Rodrigo Germade y Marcus Cooper. Su acoplamiento resultó óptimo, su estado de forma repuntó y ganaron la plata en el Campeonato del Mundo de ese verano en Hungría. Ese subcampeonato valía también el billete a los Juegos de Tokio 2020. Y la federación abrió el proceso de selección de los integrantes del K4 a los seis implicados en las tres medallas mundiales conseguidas entre el 2016 y el 2019, con los cinco palistas citados más Carlos Garrote. Se desató entonces una guerra interna en la élite de los kayakistas españoles, un polémico proceso trufado de acusaciones, recelos, enfados y muchas horas de trabajo.

Ese camino culminó durante las últimas dos semanas con el selectivo de Trasona, con diferentes contrarreloj planteadas con tres combinaciones distintas de piragüistas. Pero el proceso lo abandonaron en marcha Toro y Germade, quejándose de que algunos compañeros no habían ofrecido su mejor rendimiento cuando paleaban con ellos, y presentando bajas médicas para no presentarse a las últimas mangas. Ayer, se cerró ese proceso con la victoria de Arévalo en las dos mangas de K1 200. Este triunfo —idéntico al que había obtenido en ese formato el pasado día 4 de marzo— le impulsan para no solo disputar la prueba de K4 500 sino para doblar y participar también en la individual, para la que España tiene plaza en Japón.

Entre el agua y el Ejército

Arévalo, de 27 años y miembro del Ejército de tierra, vive su plenitud como palista, pese a todos los problemas derivados de la pandemia y las dificultades para entrenarse con normalidad. Su desempeño en el selectivo de Trasona ha sido impecable durante todo el proceso. Ganó todos los test individuales e integró el K4 500 junto a Craviotto, Cooper y Germade, el que se impuspo por más de tres segundos de diferencia a las otras dos combinaciones de palistas. Ese margen levantó los recelos de Toro, Garrote y sus entornos, al considerar sospechosa la diferencia entre barcos compuestos por palistas de élite mundial.

Las denuncias sobre posibles irregularidades ya están sobre la mesa del Consejo Superior de Deportes. Desde que comenzó la polémica, la Federación Española de Piragüismo redujo la información sobre el selectivo. No facilitó ni el tiempo del último K4 500 ni tampoco los registros de ayer en el K1 200.

El seleccionador presentará ahora el informe definitivo

«Ahora solo queda la elaboración del informe pertinente, con todos los datos que se puedan aportar a este proceso. Esperamos que en breve se tome la decisión sobre la tripulación seleccionada, y que podamos empezar de una vez a trabajar de cara a los Juegos Olímpicos, que es el objetivo», indicó ayer el seleccionador español, Miguel García. Ayer advirtió del escanso margen de que ya dispone para afinar el barco elegido para competir en verano en Japón. «Queda muy poco tiempo y los países rivales están trabajando ya con tranquilidad y preparando esa cita que es nuestra obsesión en el 2021», indicó.

El K4 500 elegido competirá en la próxima Copa del Mundo como primer test relevante en más de año y medio.