Más dudas sobre el US Open tras cancelarse el torneo de Washington

Enric Gardiner COLPISA

DEPORTES

USA TODAY USPW

La evolución de la pandemia del coronavirus en EE UU obliga a suspender la cita que iba a suponer la reanudación del circuito

21 jul 2020 . Actualizado a las 17:24 h.

La vuelta del tenis a la competición oficial ha sufrido otro revés. El torneo de Washington, que iba a dar el pistoletazo de salida al retorno de la temporada, ha sido cancelado. Apenas unos días después de que su director, Mark Ein, asegurase que eran conscientes de la responsabilidad que iban a tener por ser el primer torneo postpandemia, se ha anunciado que no se disputará, disparando las dudas sobre el resto de la temporada de cemento americana y el resto del año. «Hay muchos problemas externos sin resolverse, incluyendo las restricciones de viajes internacionales, así como las circunstancias de seguridad y salud que hay. Esto nos ha obligado a tomar esta decisión por el bien de los jugadores, los empleados y nuestros socios, para que puedan tener una certeza sobre la planificación», dijo Ein en un comunicado. «La salud y la seguridad tiene que seguir siendo la prioridad número uno», añadió el directivo.

Washington era el escenario en el que el tenis iba a retornar el 14 de agosto, pero este nuevo contratiempo pone en entredicho la viabilidad de la gira norteamericana, que luego viajaría a Nueva York para jugar los torneos de Cincinnati (22 de agosto) y el Abierto de los Estados Unidos (31 de agosto).

En estos momentos, Estados Unidos suma casi cuatro millones de contagiados por coronavirus y más de 140.000 fallecidos. Nueva York, el estado donde se jugarán el Masters 1.000 de Cincinnati y el US Open, es la región más golpeada por la pandemia, con más de 400.000 casos y 30.000 muertes. La situación del país, junto a las reticencias de algunos tenistas a dar el visto bueno a los planes de la ATP y la USTA (Federación de tenis estadounidense), pone en jaque a Cincinnati y el US Open, cuya celebración parece cada día más difusa.

Ambos campeonatos se disputarían a puerta cerrada, con los jugadores metidos en una 'burbuja' similar a la que ha montado la NBA para la finalización del campeonato. Sin embargo, aún no existe una normativa que regule si los tenistas que (y atletas en general) que viajen a Estados Unidos tendrán que hacer cuarentena o no, tanto al llegar, como al volver a Europa. Podría existir una excepción parecida a la que el Reino Unido iba a imponer para que el Real Madrid pudiera viajar a Mánchester a disputar la Liga de Campeones, pero el protocolo respecto al tenis sigue sin estar claro.

Recelo entre los tenistas Después de esta mini gira americana, el tenis volará a Europa, donde están programados los torneos de Kitzbühel (8 de septiembre), Madrid (13 de septiembre), Roma (20 de septiembre) y Roland Garros (27 de septiembre). Mientras tanto, los grandes tenistas aún no se han pronunciado de forma clara respecto a su participación en el Grand Slam neoyorquino. Rafael Nadal sigue entrenándose en Manacor, donde ha levantado las sospechas de que renunciará a defender su título en Nueva York, al haberse ejercitado estos días sobre tierra batida. En su favor juega que no perderá este año los puntos que le acreditan como ganador del torneo en el 2019, puesto que la ATP ha modificado la clasificación para que estos puntos no desaparezcan hasta el 2021.

Por su parte, Novak Djokovic sí parece confiado en poder viajar a Estados Unidos y recortar la diferencia de Grand Slams con Nadal y Roger Federer. El serbio, una vez ha dejado atrás el escándalo de sus exhibiciones y su positivo en coronavirus, lleva días entrenando sobre cemento.