La caza reanuda su campaña en Galicia con el entrenamiento de los perros

LA VOZ

DEPORTES

BASILIO BELLO

Los aficionados afrontan las batidas y las esperas del jabalí para evitar daños en plantaciones y el rececho de corzo

19 may 2020 . Actualizado a las 17:17 h.

Salvadas las idas y venidas de las normativas e incluso su interpretación, la práctica de la caza ya está permitida en Galicia, con limitaciones que los más experimentados matizaban en las primeras horas. Y es que fuera de temporada de caza menor, el rececho del corzo o las batidas y esperas del jabalí, para evitar daños en las plantaciones agrícolas, son las alternativas para disparar las escopetas a estas alturas del año.

Manuel Martínez Casal, de la sociedad cinegética de Portas y presidente de la Mesa Galega pola Caza apuntaba a otra clave, por lo que respecta a la temporada del corzo: «Desexabamos volver como auga de maio, pero para o único que se pode cazar agora, non temos precintos, esperamos que en un par de días estea solucionado». Desde la delegación federativa en Ourense, Antonio García Reinoso matizaba «os cupos de captura do corzo estaban establecidos no plan anual de caza e agora resulta que despois de case mes e pico sen cazar, non se levaron a cabo».

Tanto la caza a rececho como la del jabalí para defender los cultivos necesitan del permiso expreso del Gobierno autonómico. Al corzo se le localiza en presencia de un agente forestal, que compruebe el cumplimiento de la legalidad; en tanto que las batidas y las esperas deben ser autorizadas desde la Xunta. Si se repiten las incursiones del jabalí, provocando una solicitud, se identifica la parcela, antes de conceder el beneplácito.

En ese sentido, permanece abierta la opción de que aún pueda modificarse alguno de los plazos establecidos, sobre todo los que no pudieron llevarse a efecto durante los días del confinamiento. Es lo que sucede con el entrenamiento de los perros, restringido para evitar los meses de cría.

Así lo explica Manuel Albela, de la coruñesa Asociación de Caza de Paderne: «Mayo y junio son los meses reservados para la cría de especies y no podemos salir al monte, ni a entrenar. Hay algunos cotos que estos dos meses los cambian a abril y mayo, pero no es lo más habitual». Desde los tecores defienden la importancia de que los canes vuelvan al monte en un período de preparación, si bien José Antonio Gutiérrez, desde A Terra Chá, alertaba: «Como levamos moito tempo sen cazar, os animáis están tranquilos e cada vez máis cerca das casas».

Por lo que respecta a los los cazadores, explicó Rafael Prol, tesorero del Tecor San Martiño do Grove: «A nosa é zona de coello, e a tempada vai de outubro a xaneiro«. De ahí que, más allá de batidas puntuales, fundamentalmente de jabalí, por motivos de protección de cultivos que pueda autorizar o incluso promover la administración autonómica, «agora o que podemos é ir adestrar cos cans ás zonas habilitadas para facelo». Si bien en la mayoría de los casos toca esperar a los domingos.

Más pesimista se mostraba Luis Jartín Bautista, presidente del tecor de Ribadeo y vicepresidente de la Asociación de Caza Maior de Galicia: «Non saímos a cazar porque de momento está vedado e só están abertos os recechos. A maioría dos nosos compradores son doutras provincias, pero ao non poder desprazarse non vai haber ventas».