El judo y el taekuondo gallego se apuntan a las competiciones on line

La Voz

DEPORTES

MARTINA MISER

La suspensión de las actividades deportivas a causa del covid-19 no ha impedido que ambas federaciones mantengan la motivación por competir

04 may 2020 . Actualizado a las 13:39 h.

La pandemia causada por el covid-19 y que ha provocado la suspensión de todas las competiciones deportivas, no ha sido un impedimento para que varias federaciones busquen alternativas al parón. Este ha sido el caso de las federaciones gallegas de judo y taekuondo.

En el caso del judo, el clásico Trofeo Miguelito, todo un emblema para este deporte a nivel Galicia, ha buscado la forma de mantener la tradición. La vía telemática será la opción para miles de niños gallegos de cumplir con un cumplir que cumple treinta y dos ediciones.

Los deportes de contacto son los más afectados por el virus y los que más, a priori, tardarán en volver a la normalidad. Es por ello, que desde la federación quieren incorporar las nuevas tendencias de enseñanza y práctica on-line, así como comenzar a implementar el «Judo en la escuela sin contacto», de cara a reiniciar la actividad.

Por ello, y de cara a la disputa del torneo el próximo 31 de mayo, la Federación Gallega de Judo preparará a todos los yudokas a través de la red. Desde hoy recibirán tutoriales, láminas y vídeos de guías de entrenamiento para que puedan trabajar desde sus casas.

Un torneo con más de cien inscritos

La vuelta a la normalidad también es lo que pretende la Federación Gallega de Taekondo. Ante lo complicado de entrenar sin objetivos, entrenadores de varios clubes gallegos idearon el «I Torneo #Yoentrenoencasa». Entre el 3 y el 8 de abril se celebró la primera edición con la participación de los cuatro clubes promotores: Hebe, Neka, Natural de Sada y el asturiano Taemi.

Más de cien inscritos de entre 3 y 58 cumplieron con éxito las expectativas de una iniciativa que contó con árbitros profesionales como jueces. El torneo se dividiría en tres rondas por categoría en el que los deportistas tenían que grabarse un vídeo realizando técnica y enviarlo a través de una aplicación creada para tal evento. Allí los participantes podían ver todos los ejercicios así como su puntuación recibida.