El vigués Diego Peláez, atrapado en Grecia: «A día de hoy, parece imposible que pueda volver a casa»
DEPORTES
El futbolista rescindió su contrato con el AO Trikala griego pero no ha podido regresar por la situación en Europa
26 abr 2020 . Actualizado a las 04:00 h.El futbolista vigués Diego Peláez rescindía el pasado 9 de abril su contrato con el AO Trikala griego, donde llevaba jugando toda la temporada, con la idea de regresar a casa con motivo de la pandemia. Pero ha sido misión imposible y continúa atrapado en Grecia a la espera de una solución. Después de que le fueran cancelados varios vuelos, ha decidido armarse de paciencia y no intentar nuevas compras para no perder el dinero.
«A día de hoy, parece imposible que pueda irme», lamenta el deportista, que intentó sin éxito varias conexiones con España. Incluso se anotó en vuelos que puso el gobierno griego, pero supone que no había plazas, porque en ningún momento contactaron con él. «Sigo a la espera. Desde la embajada no te dan ninguna información ni alternativa, únicamente te transmiten lo que dice el gobierno griego. No hay manera de conseguir billetes y si logras, comprar, te los cancelan». Tanto es así, que ha desistido de volver a intentarlo. «Luego no te devuelven el dinero, te dan unos cupones con el valor del importe y eso te sirve para coleccionar cupones y poco más», comenta con resignación el jugador de 30 años.
Solo en la ciudad donde vive, a tres horas de Atenas, su compañero de piso tenía coche y pudo desplazarse hasta su país, Serbia hace más de 20 días. Pero el resto de españoles que conoce en el país están en la misma situación que él. La mayoría, añade, ni siquiera han podido resolver sus contratos, algo para lo que en su caso agradece las facilidades del club heleno.
Con unas medidas similares a las de España, en Grecia sí se puede salir a correr, aunque tanto para eso como para acudir a supermercados o farmacias se necesita enviar primero un sms. «De esa manera, te contestan y te acreditas. Si te para la policía, les muestras ese mensaje». Así, pasa los días saliendo a trotar un máximo de 20 minutos, «viendo series de Netflix, películas, haciendo ejercicio y hablando con la familia».
Cuenta que anímicamente lo sobrelleva bien aunque «te extraña la situación de no poder viajar a tu país, dentro de la Unión Europea». Se queda con que se encuentra bien y con que la peor parte les ha tocado a quienes se han visto afectados por la enfermedad. Y aunque su equipo ya le ha propuesto seguir en el equipo la próxima temporada, no le parece momento de pensar en eso. Ahora su prioridad es volver a casa y poner fin a esta primera experiencia de su carrera en el extranjero: «Estaba siendo muy bonita, me estaba yendo realmente bien, pero se ha estropeado y el final está siendo bastante feo», concluye.