¿Están los equipos gallegos preparados para cumplir el protocolo sanitario exigido por LaLiga?

redacción LA VOZ

DEPORTES

Oscar Vázquez

En caso de que las autoridades sanitarias permitan la vuelta al trabajo de los equipos, ¿cuál es la situación de las ciudades deportivas de los principales equipos gallegos?

09 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

El Celta tiene complicado cumplir con las exigencias establecidas por LaLiga para evitar contagios en la vuelta al trabajo. El protocolo habla de entrenar en tres o cuatro campos separados y en A Madroa solo hay dos de hierba, lo que obligaría a al menos un turno a ejercitarse en sintético. También especifica que deberá haber un máximo de dos jugadores por campo en la primera fase, lo que significa que para 24 futbolistas, entrenando en tandas de seis, se necesitarían al menos doce horas.

Tampoco parece fácil realizar la concentración previa recomendada. En A Madroa es imposible porque carece de habitaciones. La alternativa sería concentrarse en un hotel, pero la opción estaría llena de complicaciones ya que unas 40 personas tendrían que confinarse después de superar el pertinente test durante unas dos semanas, con el añadido de que un falso positivo obligaría a hacerle de nuevo pruebas a los concentrados y a todos aquellos con los que hubiesen tenido contacto. Además, las estrictas medidas dejarían en una posición difícil a la cantera, incluido el Celta B.

El Deportivo sacaría partido de los siete campos de Abegondo

El Deportivo de La Coruña podría lidiar con relativa facilidad con el riguroso plan de vuelta a los entrenamientos que ha bosquejado LaLiga.

La ciudad deportiva de Abegondo dispone de siete campos de hierba natural, trece vestuarios -diez de ellos completamente equipados- y varios gimnasios que ayudarían a la plantilla coruñesa a adaptarse para poder sortear todos los límites de seguridad previstos y reducir al máximo los contactos, tal y como plantea el documento elaborado por LaLiga.

Las dudas surgen a partir de la tercera etapa de regreso a los entrenamientos redactada por LaLiga y que insta a los clubes a concentrar a toda su plantilla y personal técnico en residencias.

Esta fase sería imposible de realizar en la ciudad deportiva de Abegondo ya que no dispone de habitaciones para sus futbolistas y obligaría al club a contratar los servicios de un hotel de concentración. Además, según indica el protocolo enviado a los clubes, debería alojarse en exclusividad en un complejo, por lo que el club coruñés quedaría a expensas de la disponibilidad de los mismos.

Medidas complejas para un Lugo con instalaciones austeras

Desde el Club Deportivo Lugo se entiende como una utopía el protocolo de actuación de LaLiga para reanudar la actividad. Una realidad imposible para un equipo que trabaja a diario en unas instalaciones austeras y que no son de su propiedad. Si de algo carece el conjunto rojiblanco es de infraestructuras para ceñirse a las medidas de prevención pensadas por la patronal.

La plantilla que conduce Curro Torres trabaja de manera habitual en la instalación deportiva del polígono de O Ceao, de propiedad municipal y donde solo cuenta con un campo de hierba natural y un local principal con un par de vestuarios, uno grande para los futbolistas y otro más pequeño para el cuerpo técnico, un gimnasio y varias salas para distintos usos. Enfrente a la única grada del campo existe otro pequeño local con varios vestuarios de reducidas dimensiones. De manera puntual, el equipo rojiblanco trabaja en su estadio del Ángel Carro, propiedad de la Xunta, o en el anexo de A Cheda e incluso se desplaza a distintos municipios de la provincia para preservar el terreno de juego de O Ceao.