Premio a la valentía en la Super Bowl

Carlos Pastoriza TOUCHDOWN

DEPORTES

RHONA WISE

Los Chiefs arriesgaron y los 49ers desaparecieron; Andy Reid logró la Super Bowl que se merecía tras una dilatada trayectoria

03 feb 2020 . Actualizado a las 19:33 h.

Los Chiefs de Kansas City, con una remontada de 10 puntos en el cuarto período, liderada por el quarterback Patrick Mahomes, vencieron (31-20) a los 49ers de San Francisco y se llevaron la Super Bowl, la final de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL), que se disputó en el Hard Rocks Stadium de Miami. Terminada la Super Bowl llega el momento de analizar que pasó en el partido y por qué, tras cincuenta años, Kansas vuelve a ser el mejor equipo del mundo.

Intercambio de golpes

La primera parte fue un intercambio de golpes en todos los sentidos. Las defensas golpeaban primero, San Francisco detenía el ataque de Kansas y, a su vez, la defensa de los Chiefs lograba interceptar a Garoppolo. Por su parte, los dos ataques anotaban sendos touchdown y fieldgoals, con lo que se llegaba al descanso con un apretadísimo 10-10.

Primera parte de dos equipos muy bien preparados donde ya se vieron algunas cositas: Shanahan quería que sus 49ers estableciesen juego por tierra y tratar de no correr riesgos, mientras que Reid trataba de que sus Chiefs lograsen ritmo de juego con sus pases y dejó claro que venía a correr riegos jugando un cuarto down ya en la primera parte, algo que sería una tónica durante todo el partido.

El sueño de los 49ers

El tercer cuarto fue el sueño de los aficionados de los 49ers. El plan de juego cambiaba y comenzaron a jugar con los playaction (amagos de carrera) que, por su poderío terrestre, la defensa de Kansas no tenía mas opción que creerse. De este modo, los pases de Garoppolo volaban de forma constante consiguiendo un touchdown y fieldgoal sin respuesta por parte de los Chiefs, para un 20-10 al final del tercer cuarto.

El ultimo cuarto comenzaba mejor para ellos, ya que la todopoderosa defensa de los 49ers lograba interceptar por segunda vez a Mahomes. Pero ahí comenzó su pesadilla. El ataque de San Francisco, totalmente bloqueado, y su defensa viéndose superada poco a poco por un Mahomes cada vez más confiado, (qué peligro tiene este joven si las cosas le van saliendo) fueron mermando la diferencia en el marcador.

Garoppolo desaparece

Primero, anotación de Travis Kelce 20-17 y, después, un polémico, por lo dudoso, touchdown de Williams colocaban el 20-24. Este es ese momento, con mayúsculas, el que diferencia a jugadores normales de superestrellas. Garoppolo comienza su drive ofensivo a falta de 2:40 del final del cuatro y a cuatro puntos de distancia. Un touchdown le daría mas que probablemente la victoria. Es ese momento que todo jugador grande quiere vivir el clásico touchdown or nothing, pero ayer a Garoppolo se le midió y no dio la talla, como reza la película. Y en el momento en que más lo necesitaba su equipo, desapareció.

Poco importa, a mi parecer el último touchdown de Williams o incluso la última intercepción a Garoppolo con el partido ya acabado. Era aquel drive, ese en el que tienes que dar un paso adelante y demostrar que realmente mereces estar entre los grandes. Y él fallo.

Mucho se ha hablado antes de esta Super Bowl de si realmente está a nivel de los grandes. Sherman, su compañero, salió a defenderlo diciendo que aquellos que lo criticaban eran estúpidos. Yo mismo en la previa de este partido ni lo mencioné, porque realmente pensaba que no iba a ser un objeto diferenciador, pero, por desgracia al final sí lo fue. Pero para mal.

Como siempre pasa en estos casos, no todo es culpa de Garoppolo. Son muchos los responsables de esta derrota y el principal es Kansas, que fue valiente y arriesgó. Falló, pero en el cómputo general la apuesta les salió a favor. Soy fan de esos equipos que salen al campo con un plan y lo defienden hasta el final, y justamente eso hicieron los Chiefs, logrando que Andy Reid, tras veinte años, tenga lo que creo se merecía y, por fin, ayer ganase.

Como siempre digo: «Dios bendiga América». Dios salve a los Chiefs, al menos durante los seis meses de offseason.

Carlos Pastoriza, Charli, es presidente del del Black Widow Towers