La mejor y la peor hora que pasó el marfileño Kanouté

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El mediocentro del Fabril tuvo que ser operado de urgencia en la vesícula tras debutar con el Dépor

30 ene 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

El fútbol y la vida pusieron a prueba al fabrilista Kanouté en apenas un suspiro. El mediocentro, una de las perlas del filial entrenado por Luisito, cumplió el sueño de debutar con el Deportivo el pasado día 12 en el partido de Copa contra el Unionistas. Después de entrenarse toda la semana a las órdenes de Fernando Vázquez, salió de titular en Salamanca y fue sustituido a la hora de juego de un encuentro en el que su equipo cayó superado por su rival de Segunda B en la tanda de penaltis. Fue un carrusel de emociones. A la inmensa felicidad del debut en el fútbol profesional le siguió la decepción por la eliminación y aún se le añadió una sorpresa final para el jugador marfileño, de 21 años, a quien se le tuvo que extirpar de urgencia la vesícula nada más regresar a A Coruña.

De vuelta a la residencia donde vive, se sintió mal y le subió la fiebre. Su compañero Jawed vio el mal estado en que se encontraba y decidió avisar al director del centro, quien ordenó de inmediato su traslado a un hospital. Después de pasar la noche en observación, acabó siendo operado de una infección en la vesícula. Según luego reconoció el joven mediocentro, que había pasado las vacaciones navideñas en su país, llevaba varios días con molestias en el abdomen. Pero loco de contento por la oportunidad de entrar en los planes del primer equipo, no les dio ninguna importancia, se convenció de que era una simple gastroenteritis e incluso minimizó este malestar delante de los servicios médicos del club.

En peligro

Lo cierto es que afrontó muy mermado su estreno con el Deportivo. Su juego distó mucho de ofrecer el carácter, la intensidad y el despliegue físico habituales en este mediocentro. Al final, no solo puso en peligro su salud, pues cualquier salto o golpe del partido podría haber provocado que la infección se extendiera, sino que tampoco ofreció el rendimiento esperado por todos. Fernando Vázquez había revelado que el joven jugador le había llamado la atención en un partido del Fabril que había visto antes de regresar al banquillo del Dépor en Santiago y esta percepción se había corroborado luego durante los entrenamientos en Abegondo.

Tras permanecer unos días en el hospital, a Kanouté le espera ahora un mes de recuperación apartado de los terrenos de juego. Ya se le ha visto de vuelta a la ciudad deportiva, mientras observa desde la valla los entrenamientos de sus compañeros del filial, y asegura que se encuentra mejor, pero antes de nada deben cicatrizar debidamente los puntos de la intervención a la que fue sometido. Luego volverá a centrarse en brillar con el Fabril y conquistar de nuevo al técnico de Castrofeito. Lo que le tardará en pasar será el susto que le esperaba después del día más feliz de su incipiente carrera.