Muguruza sigue perdida

Enric Gardiner COLPISA

DEPORTES

Jerry Lai | REUTERS

La española echa a perder un gran primer set ante Riske para firmar la segunda salida express consecutiva en Grand Slam

27 ago 2019 . Actualizado a las 20:09 h.

Embarcada en una montaña rusa, sin entrenador oficial y prácticamente sin nada que perder, Garbiñe Muguruza prosiguió este martes en el Abierto de los Estados Unidos con su serie de catastróficas desdichas que recordó las lagunas en las que se encuentra inmersa y los problemas que es incapaz de resolver. La española, que se tomó un respiro tras Wimbledon y solo compitió en Cincinnati perdiendo en primer ronda, pareció mostrar una nueva y renovada cara cuando le arrancó el primer set a la local Alison Riske, pero volvió a las andadas y se marchitó antes de tiempo para despedirse por segundo Grand Slam consecutivo en primera ronda (2-6, 6-1 y 6-3).

Brotaron briznas verdes en el juego de la española en su estreno neoyorquino, como ya ocurrió en Cincinnati ante Madison Keys, quien necesitó de tres sets para apartar a la española, pero Muguruza carece de la regularidad para mantener el nivel y las briznas pronto fueron despejadas por la explosividad de Riske. Completó un primer parcial muy esperanzador. Mucho. Luchando, bregando y enseñando al animal competitivo que habita en su ser y que lleva k.o. varios meses. Arremetió contra los poderosos reveses de Riske, verdugo de la por entonces número uno Ashleigh Barty en Wimbledon, y le plantó un 6-2 como advertencia. Lejos de consolidar el momento, Muguruza se derritió al sol de la ciudad que nunca duerme. Un juego larguísimo y agotador de 13 minutos fue el camino de su final. Riske le rompió en el primer juego del segundo set tras 13 minutos en los que la española dispuso de dos oportunidades para abrochar el servicio y en los que la americana desperdició cuatro 'break points' antes de aprovechar el quinto. Muguruza ya no fue capaz de encajar el golpe. La inercia que le hizo apuntarse cinco juegos consecutivos en el primer set se desvaneció y se quedó a merced de Riske, capaz de rozar los 20 golpes ganadores en una sola manga.

Ni siquiera empezar con 'break' arriba en el tercero le supuso el empujón necesario para retornar a la pelea. Está fuera, perdida. Anabel Medina, capitana de Copa Federación y que ha ayudado a Muguruza en los dos últimos Grandes, veía desde la grada otra caída temprana de la española. Otra derrota grave que no la saca de la UVI y que la manda para casa mucho antes de lo que debería. La única noticia positiva para ella es que apenas defendía puntos, ya que el año pasado cedió en segunda ronda. Solo si las tenistas que tiene por detrás mejoran sus resultados, Muguruza abandonará el top 30 por primera vez desde mayo de 2014. Con esta primera ronda, misma instancia en la que cayó en Wimbledon, Muguruza no alcanza los cuartos de final de alguno de los Grand Slam por primera vez desde 2013. El reinicio sigue sin funcionar y Muguruza continúa perdida. Nueva York es solo otra marca más en el negro 2019 de la tenista. El reinicio necesita otra vuelta de tuerca.