Tras el susto, Cutropía aseguró que «por la tarde Iker ya era el Iker que conocemos: haciendo bromas, contento… si fuera por él se habría ido del hospital esta misma tarde. Es un luchador, por qué no va a jugar de nuevo… pero ahora eso no preocupa. Lo importante es que está bien. Esto es más importante que ganar el Mundial. Hoy ha hecho la parada de su vida», finalizó el agente.
El portero, de 37 años, fue sometido a un cateterismo cardíaco, en cuya intervención se le implantó un stent, una especie de muelle que expande el vaso sanguíneo obstruido y permite que la circulación fluya normalemente. El meta publicó una imagen en redes sociales la pasada noche desde la cama del hospital en la que tranquilizaba a sus seguidores. «Todo controlado por aquí, un susto grande pero con las fuerzas intactas. Muchísimas gracias a todos por los mensajes y el cariño», quiso agradecer Casillas tras los cientos de mensajes de ánimo recibidos.