El podio número 25 espera a Gómez Noya en casa

DEPORTES

LAURA LÓPEZ

Con 24 medallas en Mundiales, Europeos y Juegos, compite mañana en Pontevedra en el evento universal de larga distancia

03 may 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

«Tengo unas cuantas batallas para contar cuando sea viejo, eso seguro», sonríe Javier Gómez Noya al saber que mañana puede conseguir en Pontevedra su podio número 25 en grandes eventos. Solo contabilizando la cita anual con Mundiales, Europeos y Juegos, suma 24 medallas en diferentes distancias y modalidades gracias a su versatilidad. Esa consistencia le permitió ser segundo en Bermudas el sábado pasado sobre distancia olímpica (1,5 kilómetros a nado, 40 en bici y 10 a pie) y exponerse mañana en casa, ante su gente, sobre 3 kilómetros en el agua, 113 en bici y 30 a pie en el Mundial de larga distancia de la ITU, la federación internacional. «No conocía el dato, pero desde luego es mucho más de lo que podía pensar. Cuando era pequeño, me imaginaba haciendo un podio y ya me parecía lo máximo. Así que llevar 24...».

En el Mundial de distancia olímpica, Gómez Noya (Basilea, 1983) tiene cinco títulos, cuatro subcampeonatos y un tercer puesto; en los Juegos, una plata; en el Europeo, cuatro victorias y un subcampeonato; en el Mundial de 70.3 de la franquicia ironman, dos victorias y dos bronces... Y la lista se completa con su victoria del 2012 en el Mundial de triatlón cros (X-Terra) en Maui, el apenas conocido bronce en el Mundial de relevos de Tiszjauvaros 2007, la plata del Mundial esprint de Lausana 2011 y el éxito en el Europeo de media distancia de Calella 2013.

En ese mar de éxitos la prueba de mañana resulta diferente. Porque viene de firmar un regreso espectacular al Mundial de distancia olímpica después de año y medio sin competir en ese calendario y porque compite en casa. «Dentro de la temporada este no es el objetivo prioritario, pero me hace ilusión al ser en Pontevedra. Por eso quiero hacerlo bien, aunque no haya podido preparar el campeonato de forma específica como sí habrán hecho otros especialistas», razona.

Pontevedra también es una excepción en un expediente de una fiabilidad sin comparación en la historia del triatlón. En un total de 118 carreras, en diferentes pruebas de la federación internacional, totaliza 43 oros, 28 platas y 9 bronces. Subió al podio en el 67,79% de las veces que se presentó en el pontón de salida. Pero no en el Europeo que disputó en el 2011 en la ciudad donde vive, cuando un flato y las malas artes de un rival en el sector de natación le apartaron del podio, hasta terminar en el puesto 40. «Aquello fue una decepción para mí y para la gente que fue a apoyarme. Así que también por eso espero hacer un buen papel», explica Gómez Noya, que disputó en Pontevedra otras dos pruebas desde entonces.

El 2019 marca un cambio deportivo y personal. Aparcó el ironman para volcarse en la preparación para los Juegos de Tokio 2020 en distancia olímpica. Y en lugar de hacer concentraciones entre Canarias y Sudáfrica en invierno, entrenó cuatro meses en Nueva Zelanda, donde el año pasado se casó con la también triatleta Anneke Jenkins. Así que ahora, aunque sigue con Carlos David Prieto como técnico, entrena más por libre, cambiando de compañeros. «Es diferente porque entreno más solo, pero mi compromiso es el mismo. Estoy igual de volcado y sigo mi planificación igual que antes cuando tenía un grupo. Ahora en Pontevedra me junté de nuevo con la gente de siempre en algunas sesiones», explica el triatleta de 36 años.

Entre esos compañeros con los que se reunió hace unas semanas en Pontevedra está el gallego Pablo Dapena, el defensor del título que se dirime mañana. «Es el actual campeón por algo. Me sorprende cada día por su capacidad de sacrificio», explica Gómez Noya sobre un triatleta que también comenzó en la natación antes de cambiarse al triatlón. Juntos compartieron ayer un acto del Santander junto al neozelandés Terenzo Bozzone, que completa el trío de favoritos para la cita de mañana.

Plata para Kevin Tarek en categoría el Mundial de Acuatlón y oro para Noain, en sub-23

Pontevedra subió ayer al podio a dos españoles en la categoría élite y en sub-23 en el Mundial de Acuatlón. Kevin Tarek ya advertía, después de haber conseguido una octava posición dos días antes en el Triatlón Cros, que iba a por la medalla. Las expectativas con las que salió se cumplieron al lograr la plata después de una brillante carrera a nado que le permitió alcanzar la transición en cabeza. En el segmento de carrera a pie, solo el atleta azerbayano Rostislav Petsov, fue capaz de superarle.

Esa ventaja lograda en las frías aguas del Lérez -están estos días por debajo de los 14 grados- le dio a Kevin Tarek el empujón definitivo. Ander Noain consiguió el título de campeón mundial sub-23 tras un tramo de natación imparable, que le permitió gestionar bien la ventaja en el tramo a pie. El bronce también tendría color español por el trabajo de Andrés Cendán.

En categoría femenina, la polaca Aljcia Ulatowska se colgó la medalla de oro en la prueba élite después de superar a la húngara Bragmayer Zsnett en un intenso mano a mano.