El As Pontes regresa a Tercera con unos números de récord

X. Ferreiro / J. Valencia

DEPORTES

Es, con 88, el equipo que más puntos ha sumado en las 62 categorías del fútbol español

15 abr 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Tan solo dos años después de haber perdido la categoría, el As Pontes retorna a la Tercera División y lo hace con unos números de auténtico récord en el fútbol español. Sube a falta de cinco jornadas para que finalice la liga en el grupo norte de la Preferente Autonómica y con 88 puntos en su cuenta. Es la mayor puntuación conseguida por un club en las 62 primeras ligas del fútbol español, desde la Primera División a la Primera Autonómica de cada región. En media de puntos, sería el tercero, ya que lo supera un equipo de la Preferente alavesa y otro de la zona de Ibiza y Formentera, que solo jugó 13 partidos.

Si mantienen el mismo ritmo, pueden acabar la liga con más de un centenar de puntos en su cuenta. Hasta el momento, ha ganado 28 de los 33 partidos que disputó y además sumó cuatro empates. Solo encajó una derrota, el 3-2 en el campo del Boimorto. Lleva anotados 110 goles, 22 de ellos marcados por Carlos López, el máximo artillero del equipo. También ha sabido ser fuerte en el trabajo defensivo, con 26 dianas en contra.

Marco Roca, la clave

Xaime Castro, el actual presidente, trabaja duro con su equipo de colaboradores para sacar el club adelante. El gran objetivo para la temporada no era otro que el retorno a Tercera -así lo dejó claro en la presentación del equipo en la pretemporada- la categoría que por historia le corresponde a esta entidad.

Hace tres campañas confió la dirección del equipo a una persona de la casa , Marco Roca, que ha realizado un trabajo increíble, con jugadores de As Pontes, llegados de Ferrol, Viveiro y alguno de A Coruña. Consciente de que no había dinero para fichar a un crac, apostó por el trabajo en equipo por encima de las individualidades. Hace un trabajo profesional y cuenta con cuatro personas que le ayudan en las labores técnicas.

El ascenso de categoría era virtual desde varias jornadas, aunque en la mañana de ayer, tras vencer al Castro por 11-1, se consiguió el punto que hacía falta para que fuese matemático. Este título de campeón, aunque quedan cinco partidos por jugar, es un broche de oro a una temporada histórica para el club de fútbol pontés.

De los once tantos anotados por el Endesa en este encuentro ante el Castro, Carlos hizo cuatro, Pardo, 2, mientras que los otros fueron de Quique, Criado, Bossa, Enri y Dani. La primera parte ya acabó con un tanteo de 5-0.

Un club con gran solera en el fútbol gallego

El Club Deportivo As Pontes, fundado en 1960, aunque desde 1933 ya se jugaba al fútbol en esta localidad de la comarca del Eume, es una entidad con una gran solera en el fútbol gallego. Esta campaña retorna a la Tercera División, tan solo dos años después de haber perdido esta categoría.

En la historia de esta entidad figuran nueve ligas como representante gallego en la Segunda División B. Incluso en la temporada 91-92, tras acabar en la cuarta posición en la liga regular, tras el Salamanca, Lugo y Sporting de Gijón, disputó una promoción de ascenso a la División de Plata del fútbol español. Fue una de las etapas más brillantes de los ponteses, con Luis Rodríguez Vaz en el banquillo y jugadores de la talla de Nando, Alfonso, Quico, Carou o Salido, entre muchos otros.

La última campaña en la división de bronce del fútbol español fue la 1997-98. Desde entonces ha estado a caballo entre la Tercera División y la Preferente Autonómica.

Una cantera inagotable

El As Pontes no es solo el primer equipo. Dispone de unas instalaciones de lujo, con varios campos de fútbol, lo que le permite mantener a una de las mejores canteras del fútbol gallego.

Sus éxitos en la base son numerosos, tanto a nivel local, como provincial o autonómico. Ha llegado a tener un equipo en la División de Honor de juveniles.

Tras los buenos tiempos del patrocinio por parte de la firma Endesa, que tiene una central térmica en esta localidad, el club ha tenido que apretarse el cinturón y sufrir para mantener en plena actividad al primer equipo y también para permitir que cientos de niños y jóvenes puedan seguir jugando al fútbol en sus muchos equipos de las categorías inferiores.