El fichaje de la viguesa Marta Canella pone en duda los derechos de formación

E. V. Pita LA VOZ

DEPORTES

XOAN CARLOS GIL

La Audiencia Nacional rechaza que el Aros pague al Celta por su pérdida

04 abr 2019 . Actualizado a las 20:55 h.

Una sentencia pionera dictada por la Audiencia Nacional ha denegado el pago de 11.715 euros al CD Celta Bosco de Vigo en concepto de derechos de formación por la exceleste Marta Canella, fichada por el CD Baloncesto Aros de León. La jugadora, de 21 años, apostó en el 2016 por fugarse al club castellano porque, tras liderar triunfos europeos, se vio relegada en Vigo por una lesión degenerativa en ambas rodillas. En León la recuperaron con células madre que regeneraron su cartílago y pronto ganó más títulos.

El club formador vigués, amparado por la ley deportiva, reclamó al Aros una compensación por la pérdida de competitividad después de que fichase a su joven estrella. Ella sintió su honor herido porque había dado a entender a los leoneses que venía libre y ahora parecía como que había timado a su nuevo club por ocultarle que cargaba con una mochila con 11.700 euros de deuda. Los castellanos alegaron que ella dejó Vigo porque ya no la querían en sus filas y fue la propia jugadora quien les ofreció sus servicios. Por eso, se negaron a resarcir la extinción unilateral de un contrato porque ya no existía relación laboral con la jugadora.

El abogado del club leonés, Ángel Loureiro, padre de una compañera de equipo de Canella, argumentó que los vigueses habían demostrado un «nulo interés» por contar con la jugadora lesionada y no tenían razón en su reclamación. Vio fallos en la redacción de la ley deportiva que obliga a la sociedad que ficha a una estrella a pagar derechos de formación al club modesto que curtió a la joven promesa. El letrado cree que esta sentencia obligará a cambiar el texto de los derechos.

La sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional anula ahora la compensación. Ve probado que la jugadora regresó de su Erasmus en Bélgica y detectó una pérdida de interés por su continuidad en el Celta Bosco. «No se trata de compensar la pérdida de un jugador que se marcha a otro club que hace una mejor oferta pues el Bosco no tenía intención de mantener a la jugadora en sus filas al detectar su problema físico», dice la sala.