Deportivo y Lugo, con brazaletes curtidos en el Fabril

X. Fernández, M. de Dios A CORUÑA, LUGO

DEPORTES

Carlos Pita y Álex Bergantiños, en el Dépor-Lugo del 2013
Carlos Pita y Álex Bergantiños, en el Dépor-Lugo del 2013 CESAR QUIAN

Pita y Bergantiños, los capitanes del derbi del domingo en Riazor, mantienen su amistad desde la cantera blanquiazul

04 ene 2019 . Actualizado a las 13:41 h.

Le lleva un año a Bergantiños, así que alcanzó antes el Fabril. Para cuando el futbolista de La Sagrada saltó desde el juvenil al filial blanquiazul, Carlos Pita ya hacía cameos con el primer equipo. Estuvo incluso a «una dudilla» de estrenarse en Champions con el Dépor durante el último paso del club por la máxima competición continental. «No sabía si iba a hacer correctamente las ayudas defensivas, y en cierto modo era meter al chico en un marrón», explicó Irureta tras dejar sin minutos frente al Olympiacos al centrocampista, convocado para disimular las bajas de Duscher y Mauro Silva. Lo citó de nuevo para viajar a Mónaco, pero tampoco allí pasó del banquillo. En Atenas, ya en la segunda vuelta de la fase de grupos y con el equipo prácticamente desahuciado, Pita se quedó en la grada tras ser alistado a última hora por los problemas de Sergio en el aductor. Debutó al menos en Liga, el día del adiós del técnico y de Fran. Unas molestias en el tobillo impidieron al de Carreira salir a despedirse sobre el césped y regalaron once minutos en blanquiazul al hoy capitán del Lugo. No tuvo más.

«Este mundillo va llevando a cada cual por su camino y él tuvo que salir. Está claro que tenía un nivel importantísimo, pero al final dependes de las circunstancias, de la suerte y de los momentos puntuales para dar el salto en un sitio o en otro. Que tenía condiciones de sobra para el fútbol profesional estaba claro para quienes compartíamos vestuario con él en la cantera», apuntaba ayer Bergantiños sobre su antiguo compañero en el filial. «Álex podría ser mi representante, me vende muy bien», replicaba Pita en RadioVoz al conocer las palabras de su amigo.

Reencuentro dominical de coruñeses en un duelo que ya vivieron hace cinco años. «Ya solo queda él, de los jugadores con los que coincidí allí. El derbi anterior en ese sentido fue muy diferente porque había mucha gente de la casa, pero sigue siendo especial jugar contra el Dépor, en casa. La familia irá a ver el partido y es un aliciente más», confesaba el capitán del Lugo durante su charla con Alberto González en La Voz del Deporte.

La amistad entre los portadores del brazalete se mantiene desde aquel curso 2004-2005. «No solemos hablar tanto de fútbol, sino de cosas más personales. Tengo allí a Seoane también, con quien compartí vestuario en Tarragona, pero con Carlos llevo una relación especial por haber compartido nuestra formación aquí», detallaba Bergantiños al concluir el entrenamiento en Abegondo. Explicación sostenida por Pita en tierras lucenses: «Cuando hablamos es del día a día, del vestuario, de cómo está viendo él situaciones más personales; nos ponemos un poco al día de todo». El capitán rojiblanco se apunta además al intercambio de halagos. «Álex es muy buena gente y un fenómeno tanto como persona como jugador», sostiene acerca de su ahora rival.

«Va a ascender directo»

La admiración por el adversario trasciende al centrocampista y alcanza a todo el conjunto coruñés: «Ha dado un cambio bastante grande en cuanto a estructura con Carmelo, es un director deportivo con las ideas muy claras, conoce muy bien la Segunda División y a muchísimos jugadores. Hizo una plantilla súper competitiva con alto nivel individual y colectivo. Es un equipo muy trabajado, el entrenador también tiene las ideas muy claras y son muy fuertes, sobre todo en Riazor». «Creo que es un equipo para ascender y que va a ascender directo», aventura Pita, listo para el duelo del domingo.

Ayer se ejercitó con normalidad tras varias semanas recuperándose de una pubalgia. Un regreso fundamental para el Lugo, si se atiende a la opinión de Bergantiños: «Tenía todas las condiciones del mundo y al final con su esfuerzo ha hecho carrera allí. Lleva muchos años dando el nivel que tiene, muy alto, y es muy respetado por lo buen futbolista que es». Cruce de elogios, de capitán a capitán.