Antepenúltima cita de la temporada, y llegamos a uno de los GP donde los aficionados viven las carreras de una forma especial. Da igual que sea la fórmula E o la F1. El ambiente en México por el automovilismo es increíble. Así que fue un gran acierto su vuelta al gran circo desde el 2015. y el atravesar el estadio de béisbol donde las gritos de los aficionados se oyen casi más que los motores. El autódromo Hermanos Rodríguez tiene una gran recta donde los F1 casi llegarán a los 350 kilómetros por hora, es un circuito que se encuentra a más de 2.000 metros sobre el nivel del mar por lo que los motores turbo perderán un poco de rendimiento, y los frenos sufrirán más de la cuenta. No es un circuito complicado, técnicamente hablando. Y hay muchas probabilidades de que Lewis Hamilton se proclame campeón del mundo por quinta vez en su carrera. 5 puntos tiene que conseguir sobre Vettel.
Y tras el quizás mejor GP de la temporada, que fue la carrera de Austin, donde Raikkonen y Verstappen hicieron una carrera muy buena, permitiéndole a Vettel salvar el primer «match ball» con Hamilton. Quizás ha sido una temporada en la que Sebastian se ha puesto demasiada presión a sus espaldas, es un grandísimo piloto, pero su actitud en pista denota demasiada frustración, y cuando quieres lograr resultados en esa situación, suele acabar con errores. Tiene que relajarse, y más cuando el año que viene tendrá a un piloto que ha trabajado mucho la cabeza, y está centrado en lo que de verdad debe hacer, sin centrarse en los rivales. Estén muy atentos a Charles Leclerc el año que viene.
En cuanto a Carlos Sainz, ha hecho una gran segunda parte de la temporada. Todavía puede empatar con Hulkenberg en el duelo de clasificatorias, y la verdad es que, aunque empezó muy por detrás del alemán, ha logrado reponerse y estar por delante de él en muchas ocasiones. El año que viene tendrá un gran reto con Mclaren. Los ingleses ya hace tiempo que abandonaron el diseño de esta temporada, centrándose en el 2019. Se la juega Zak Brown,