El velocista gallego ya puede presumir de haber logrado un triunfo como profesional
18 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.En el 2018, el ciclismo gallego asomó su cabeza entre la élite internacional con la participación de Pablo Torres en la Vuelta a España. Otro coruñés, compañero de Torres en el Burgos BH, se quedó a las puertas de acompañarle. Su nombre es Daniel López Parada (A Coruña, 1994), un velocista de raza que amenaza con brindar grandes tardes de gloria al deporte gallego. A sus 24 años, ya puede decir que ha logrado una victoria como profesional, la duodécima etapa de la Vuelta al Lago Qinghai, además de conseguir un sexto puesto en la Vuelta a Castilla y León y otros nueve top 10 en diferentes pruebas celebradas en China. Dani dice no ponerse límites y amenaza con llegar a lo más alto. Madera parece que tiene.
- Se acabó la temporada. ¿Cómo la valora?
- Ha sido un año muy bueno. Buscaba dar un paso adelante, hacerme un nombre en el ciclismo internacional, y lo he dado. Así que vamos a intentar mantener esta línea el año que viene. Estamos muy contentos de los resultados obtenidos, tanto el equipo como yo, sobre todo en esta segunda parte de la temporada.
- Y con victoria.
- Pues sí. Era algo impensable hace años. Tener un triunfo en categoría profesional no lo puede decir cualquiera. La verdad es que fue una satisfacción increíble. Fue un momento que me aportó mucha tranquilidad y confianza, no solo para mí, porque creo que también motivó que el equipo mejorara en toda esta segunda parte de la temporada. Vernos delante, con esa responsabilidad, nos sentó muy bien.
- Fue además, la única del equipo.
- Era nuestro primer año como Continental Profesional y no sabíamos muy bien en dónde íbamos a estar. Así que conseguir esa primera victoria en el primer año ha sido muy importante. De hecho, el Burgos ya es un equipo reconocido en Asia, nos respetan dentro del pelotón y nos dejan muchas veces la tostada porque saben que somos un equipo fuerte.
- Pero además de esa victoria, ha conseguido bastantes «top ten». Diez, en total. Así que pudieron llegar más triunfos...
- Si soy sincero, tampoco llevo exactamente la cuenta. Pero esto también demuestra esa regularidad que es tan importante en nuestro deporte. Estar ahí, todos los días, es lo realmente difícil. Es esa regularidad la que hará que en el futuro lleguen más victorias. Una vez estás ahí, en el grupo ganador, ya es muchas veces cuestión de tener un poco más de suerte, de tener el día bueno, de encontrar el espacio bueno en el esprint... Pero si al final todos los días estás ahí, alguno te tiene que tocar.
- El único pero del año fue la lesión. Le cogió en el peor momento. Se cayó en el Tour de Bélgica a finales de mayo y le operaron dos veces en diez días de la mano rota y de la nariz.
- Sí, era un momento muy importante porque era en el que prácticamente se decidía el equipo de la Vuelta a España. Yo me encontraba muy fuerte y era el momento de demostrarlo. Lo que pasa es que me caí en la segunda carrera de ese segundo ciclo de la temporada y ya no lo pude demostrar... Pero bueno, aún me quedan muchos años de ciclismo por delante y estoy tranquilo en ese sentido. No es algo que me preocupe.
- Como dice, habrá más años para disputar la Vuelta a España.
- Eso es. Hay mucho camino por delante y lo que realmente importa es trabajar día a día, año a año, y mantener esta buena línea. Así que si no ha sido este año, será otro.
«Aún estoy en el principio de la profesión y espero estar más adelante de lo que estoy ahora, incluso»
López Parada tiene el futuro en sus piernas. No en vano, siempre ha estado considerado como una de las grandes promesas del ciclismo español, formando parte del equipo nacional que disputó el Mundial sub-23 en el 2016. El próximo año, seguirá como profesional en el Burgos BH y luchará por estar en La Vuelta.
- ¿Vio La Vuelta? ¿O por rabia o pena no fue capaz?
- Al final, entre entrenamientos y demás no vi demasiado... Pero sí que seguí los días importantes, veía siempre los resúmenes... En directo quizás no tanto, porque también me coincidía con los horarios de entrenamiento y no siempre podía.
- ¿Estamos ante su mejor versión? ¿O le queda margen de mejora?
- Todavía queda. Aún estoy en el principio de la profesión y espero estar más adelante de lo que estoy ahora, incluso.
- ¿Hasta dónde puede llegar? ¿Cual es su límite?
- No debo ponerme límites. Cada día intento hacerlo lo mejor posible para progresar y poder llegar hasta donde se pueda, a base de muchas horas de trabajo. Así que hasta que llegue el final de mi carrera no se sabrá dónde está mi límite.
- ¿Y el año que viene? ¿Qué será de usted?
- Pues seguimos. Tengo contrato con el Burgos BH e intentaremos seguir en la misma línea de mejorar y de intentar llevar al equipo lo más alto posible.
- Y a intentar entrar en el equipo de La Vuelta, ¿no?
- Sí. Es un objetivo importante. Pero hay que ver primero cómo va el año. La Vuelta se disputa en la parte final de la temporada y hay que estar todo el año regularmente delante para poder entrar. Así que vamos a intentar estar al nivel en la primera parte del año para que el equipo confíe en mí de cara a La Vuelta.