Con su bronce en el Mundial de Canadá, el cangués logra su sexta medalla internacional desde el 2013
09 ago 2018 . Actualizado a las 20:32 h.Forma parte de una generación que ha impulsado a España a potencia mundial en kayak polo. Alejandro Casal (Cangas, 1989) sumó con el bronce en el Mundial de Welland su sexta medalla internacional desde el 2013. Asentado entre los mejores del mundo y requerido en Italia o China, el pívot cangués sigue buscando reconocimiento a un deporte olvidado por las instituciones.
¿Cómo llegaron de forma al torneo?
Tuvimos problemas desde antes de llegar. El entrenador viajó más tarde por el visado, los desplazamientos fueron un caos, tuvimos que coger dos coches y la comida nos afectó bastante.
¿Estos problemas se repitieron durante el campeonato?
El mayor contratiempo fue la lesión de nuestro portero en el último partido de la segunda fase de grupos. Tuvo que volver a jugar lesionado en la semifinal contra Alemania y perdimos 6-2.
¿Cree que si no se hubiera lesionado habrían estado en la final? Ya vencieron a Alemania el verano pasado.
A lo mejor nos habrían ganado igualmente, pero hubíesemos plantado cara. Luego el tercer y cuarto puesto lo disputamos con un jugador de campo haciendo de portero, a la heroica.
Después del título europeo del 2017, ¿están satisfechos con este bronce mundial?
El objetivo inicial era el oro, pero viendo cómo ha ido el torneo estamos contentos. El año que viene intentaremos empezar antes a entrenar juntos, contamos con mantener el bloque.
Los rivales más duros estarán de nuevo en el Europeo de Coímbra.
Destacan Alemania, Italia y Francia. Fuera de aquí, solo Nueva Zelanda o China, que está despegando desde hace unos años.
Y la selección española ha conseguido convertirse en un fijo en los podios de los últimos años.
Somos los más regulares en el top cinco mundial. Desde el 2013 llevamos tres medallas mundiales, dos europeas y una en los World Games. Salimos a medalla por año y no es fácil.
¿Son la primera generación en España que consigue medallas?
En el 2004 lograron la primera medalla sub-21, pero en sénior somos los pioneros. Aun así, siempre somos los olvidados.
¿Da por acabada la temporada?
No, aún me quedan los Campeonatos de España de clubes con el Náutico de Castellón y de Autonomías. Además, estoy pendiente de jugar el Europeo de clubes con el Siracusa italiano. También barajo ir a una liga privada en China, así que seguiría hasta mediados octubre.
¿Serían sus primeras experiencias con un club extranjero?
No, ya estuve concentrado con ellos en Zúrich en febrero e iba a jugar la liga pero hubo problemas con la Federación. El permiso desde España llegó a mitad de la temporada y en Italia no quisieron arriesgarse. Antes era muy habitual doblar en ligas extranjeras, pero este año se han puesto exigentes.
¿Cómo logra moverse tanto?
Cuando tienes suerte de llegar a este nivel, eres un caramelito para ellos y te buscan.
¿Dedica al kayak polo todo su tiempo?
No, también estoy estudiando Medicina en la Universidad de Santiago. Ya acabé Enfermería y Fisioterapia, y gracias a eso puedo trabajar en una residencia.
Y aun así es capaz de competir a este nivel...
Entreno siete días a la semana en Santiago, doblando sesión. Me gusta trabajar en el gimnasio.
¿Cree que recibe el reconocimiento suficiente?
Cuando estaba en el Náutico de Rodeira, mi club de toda la vida, llegaron a nombrarme mejor deportista en la gala local en el 2014. Desde hace unos años como mucho me envían una carta si ganamos algo, pero nada más.