Toro triunfa con el K-2 200, al igual que Germade en el K-2 500; y Roi Rodríguez fue bronce en el K-1 1.000 metros
19 may 2018 . Actualizado a las 21:53 h.El piragüismo gallego comienza a imponer su ley en la Copa del Mundo de Szeged. El viveirense Cristian Toro y el cangués Rodrigo Germade lograron sendas medallas de oro en la segunda jornada de este evento celebrado en Hungría, mientras que el tomiñés Roi Rodríguez alcanzó el bronce.
Toro disputó la final de K-2 200 metros acompañado por ilerdense de Saúl Craviotto y los campeones olímpicos en la prueba de 500 en Río 2016 no defraudaron. Firmaron un tiempo espectacular de 31 segundos y 429 milésimos y aventajaron en 3 décimas a los serbios Novakovic y Grujic y en 8 a los polacos Mazur y Kliczkowski.
Una gloria que también alcanzaron el cangués Rodrigo Germade y el mallorquín Marcus Cooper Walz en K-2 500 metros. El barco español realizó una carrera perfecta, dominó de principio a fin y firmó un incontestable tiempo de 1 minuto, 26 segundos y 893 milésimas. Germade y Cooper aventajaron en un segundo a los rusos Pogreban y Postrigai y en 1,1 a los húngaros Nardas y Erdossy.
Por último, el piragüismo gallego también celebró el bronce del tomiñés Roi Rodríguez en K-1 1.000 metros. El gallego compitió muy bien en una final de gran nivel y acabó tercero, con un tiempo de 3 minutos 26 segundos y 259 milésimas, tras el portugués Fernando Pimenta (plata olímpica en Londres y campeón del mundo 2017) y el joven húngaro el Bálint Kopasz (triple medallista europeo).
Estas tres medallas para España se suman a la cosechada el viernes por el guipuzcoano Íñigo Peña y el talaverano Francisco Cubelos en K-2 1.000 metros.
El domingo, última jornada
Este domingo se celebra la última jornada de la Copa del Mundo con más opciones de medalla para los gallegos: el betanceiro Carlos Arévalo (K-1 200); Rodrigo Germade y Cristian Toro (K-4 500); Roi Rodríguez (K-1 500); y Noel Domínguez (C-2 1.000 metros).