La coruñesa no pudo colgarse ningún metal en los dos tiempos
29 mar 2018 . Actualizado a las 22:46 h.La coruñesa Irene Martínez, nacida en 1993, logró ayer la primera medalla de categoría absoluta de la historia de la halterofilia gallega al hacerse con el bronce en la modalidad de arrancada en la categoría de menos de 63 kilos de peso corporal del Campeonato de Europa que se celebra en Bucarest (Rumanía) en un desempeño en el que demostró que se encuentra en su mejor momento de forma de los últimos tiempos.
Irene Martínez fue una de las tres representantes españolas en el certamen internacional, junto a la campeona Lydia Valentín (que tiene todos los títulos en su palmarés, pero todavía no compitió en este Europeo) y Atenery Hernández (que se quedó a un paso del podio en la categoría de menos de 53 kilos de peso corporal).
La gallega del Club Halterofilia Coruña y residente en la Blume de Madrid comenzó su competición con un exitoso intento de levantar 92 kilos en arrancada, lo que ya le aseguraba la medalla a las primeras de cambio. El paso de los minutos determinaría de qué material sería esa presea. En el segundo intento, un ligero desajuste técnico le impidió ejecutar un levantamiento de 94 kilos e hizo nulo. Esto condicionó su tercer intento, ya que Irene demostraba estar en un buen momento físico y solo la presión de no poder fallar le condicionaba a no levantar más peso. Sin embargo, la superó con solvencia y certificó los 94 kilos que le otorgaban una histórica medalla de bronce para del deporte gallego.
Hasta ese momento, solo le habían superado las rumanas Loredana Toma (110 kilos) e Irina Lepsa (97). Todas las atenciones desde entonces se centraban en los registros del dos tiempos y del total olímpico.
Comenzó la segunda manga de su participación en el Europeo con un intento de levantar 106 kilos en dos tiempos, pero hizo nulo. La gallega probaba de este modo con un registro que suponía todo un reto para ella, ya que solo había levantado más peso en una ocasión: 110 kilos en el 2016 en el Campeonato de España absoluto. Con todo, Irene Martínez perseveró y lo consiguió en su segunda oportunidad. En su tercer intento, la internacional española probó con 109 kilos, y solo un detalle desafortunado en la finalización del segundo tiempo le impidió certificar esa marca. Irene terminó séptima.
El podio en esta fase de la competición quedó integrado por las rumanas Loredana Toma (131 kilos), Irina Lepsa (122) y la finlandesa Anni Vuchijoki (117), lo que arrojaba un reparto de medallas en el total olímpico de la siguiente forma: Loredana Toma (236 kilos), Irina Lepsa (219) y Anni Vuchijoki (203). Irene Martínez acabó el Campeonato de Europa en la cuarta clasificación del total olímpico con 200 kilos.
Apenas unos minutos después de su histórica participación, la deportista gallega mostraba a La Voz de Galicia su satisfacción por el resultado obtenido. «Me sentí muy fuerte, así que estoy en el buen camino para seguir peleando por estar ahí arriba», resumía. «Estoy muy contenta por mi primera medalla absoluta. Quería pelear por el total olímpico, que es lo que más importaba en este Europeo, pero bueno, por algo se empieza», analizaba.
«El año es muy largo y es una muy buena forma de empezar», concluía con vistas a un futuro que le depara el Mundial absoluto, que se celebrará en Turkmenistán los diez primeros días de noviembre, y será puntuable para obtener una plaza en los Juegos Olímpicos de Tokio del año 2020. El 6 de octubre tendrá que afrontar la clasificación para esa competición.