Debemos acercarnos al Sur, pero lo justo, por el peligro de las zonas de acción de icebergs, que no son una broma
23 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Me vais a disculpar porque esta vez voy a ser un poco breve. Desde el principio de la etapa están siendo días un poco… ¿cómo describirlos? ¡Ajetreados! Así que necesito todo el tiempo posible para descansar y prepararme para lo que está por venir, pero aún así aquí van unas líneas.
Lo primero que quiero decir es que Ñeti [Antonio Cuervas-Mons, proa y boat captain del MAPFRE] ha vuelto al equipo después de unos meses en los que estuvo trabajando duramente para recuperarse y la verdad es que es un placer volver a tenerle a bordo.
En las tres etapas anteriores estuve navegando con Louis Sinclair como compañero. Me explico, porque pensareis que todos son compañeros, y lo son, pero con unos pasas aún más tiempo si cabe. A bordo, para ir siempre con el barco al máximo rendimiento, nos organizamos en guardias de cuatro horas, en las que cuatro personas están en cubierta y cuatro fuera de guardia. Y luego está Vila, el navegante, que siempre está fuera de guardia porque pasa la mayor parte del tiempo en la mesa de navegación estudiando los partes meteorológicos. Cuando hay que hacer una maniobra, todas las manos están en cubierta. Pero cuando no es así, son cuatro personas las que están en cubierta. Y dentro de esos cuatro nos vamos cambiando por parejas: Xabi va con Sophie, Rob con Willy, Pablo con Blair y Ñeti y yo. Cuando toca cambio, cambian dos personas, por ejemplo entran en la guardia Rob y Willy, y salen Pablo y Blair. Entramos Ñeti y yo, salen Xabi y Sophie. Y así todo el rato. Por eso digo que Ñeti es mi compañero.
Louis estuvo sustituyendo a Ñeti mientras estuvo lesionado y de él aprendí muchas cosas pero debo reconocer que al final siempre echas de menos especialmente a ese compañero con el que empezaste esta aventura y en este caso es Ñeti. ¡Ya lo tenemos de vuelta y es un gusto verlo moverse por el barco!
La regata va muy justa, tal y como nos y os estamos acostumbrando. Ya vimos en las últimas etapas que toda la flota se mueve en muy pocas millas… Hace unos días pasamos el paralelo 52º Sur y seguimos a toda marcha hacia abajo porque tenemos que rodear Cabo de Hornos que está más o menos el 62º Sur.
Pero antes de eso nos encontraremos con las puertas de exclusión de hielo, que no son otra cosa que una línea imaginaria que se traza al unir las coordenadas que nos da la organización. Esa línea no podemos traspasarla para evitar que entremos en las zonas de acción de icebergs, que no es una broma.
Los frentes que ahora llegan, con viento muy duro, seguro que van a hacer que los próximos días sean bastante «divertidos», sobre todo por el número de maniobras que tendremos que hacer si queremos acercarnos lo máximo posible al Sur ?llega un momento en que chocas con la zona de exclusión de hielo y no puedes bajar más, así que hay que ir todo lo pegadito que podemos a ella para aprovechar al máximo los vientos del Gran Sur? y también porque la flota está muy peleada.
Esta etapa vale doble y además el primero que cruce la longitud de Cabo de Hornos se lleva un puntito extra, así que estoy segura que ni el Mapfre ni ninguno de los otros barcos va a dejar escapar la posibilidad de sumar un punto extra.
Así que nada, os dejo y me voy a descansar que los próximos días serán duros de pelar…
Un abrazo a todos, Támara.