El portero del Paris Saint Germain hizo realidad uno de sus sueños al ser partícipe de la gesta de los Hispanos
28 ene 2018 . Actualizado a las 23:01 h.Rodrigo Corrales (Cangas, 1991) ya luce al cuello su primera medalla con la selección española. Es de oro y continental. El portero del Paris Saint Germain hizo ayer realidad uno de sus sueños al ser partícipe de la gesta de los Hispanos en la final del Campeonato de Europa.
Corrales estuvo en el siete inicial frente a Suecia y detuvo el primer disparo de los nórdicos. Sin embargo, la velocidad de los suecos en el contragolpe y el tiempo que España tardó en ajustar su defensa le pasaron factura y provocaron que Jordi Ribera buscara un revulsivo con la entrada de Arpad Sterbik, que se presentó en Croacia a mitad de campeonato para sustituir a Pérez de Vargas, y que acabó parándolo casi todo en la gran final.
El Europeo de Corrales ha sido de sobresaliente. Cumplió en la fase clasificatoria y en los compromisos más delicados. A la hora de la verdad, sacó a relucir el nivel que le ha permitido situarse entre los porteros punteros de Europa. Ante Alemania, y tras la lesión de su amigo Pérez de Vargas, asumió la responsabilidad y realizó paradas brillantes que permitieron a los Hispanos llevarse el triunfo. En la semifinal contra los franceses se pasó prácticamente los 60 minutos bajo palos, salvo las acciones de penalti, y realizó intervenciones determinantes y en momentos clave, dando a sus compañeros la seguridad que necesitaban para romper con la historia y apear del campeonato a su bestia negra. «Confío en ganar el oro como confiaba en vencer a Francia», aseguraba a La Voz el portero en la víspera de la final. Y su fe se hizo realidad. Cuatro días después de soplar las 27 velas, Rodrigo recibió el regalo deseado: se convirtió en campeón de Europa con una selección que ya es historia.