El delantero uruguayo y Messi firman un final de año histórico
24 dic 2017 . Actualizado a las 07:51 h.Cuando parece que la Liga está casi sentenciada, cuando parece que el Barcelona celebra algo más que el campeonato de invierno y al Real Madrid se le ha bajado de un zarpazo toda la euforia del mundialito, el clásico deja más de una lectura.
La victoria azulgrana y lo que supone para el torneo es una de ellas, pero en clave culé, Ernesto Valverde debe pensar que por fin el Barcelona respondió definitivamente en un gran partido (ante Atlético y Valencia terminó empatando), así como que ha recuperado para la causa a Luis Suárez. El charrúa abrió la lata en el Bernabéu y mostró que su racha anotadora no ha acabado aún. Lástima que el 2017 se acabe ahora.
El final de año del uruguayo es más que notable. Luis Suárez ha marcado siete goles en los últimos seis partidos y se coloca ya con una decena de dianas en la tabla de anotadores de la Liga. Buenas noticias para los de la ciudad condal. No era normal lo que el charrúa estaba errando en estos primeros meses de temporada. Ahora, vuelve a sentir de cerca la inspiración de la musas y sus goles comienzan a ser también determinantes. Sus diez goles en estos primeros meses de competición se acercan algo más a las cifras razonables que se le exigen a un delantero de su talla.
Junto a él, cerró el clásico Messi, que sigue dejando hitos históricos en su carrera profesional y en la Liga como competición. Parece que nada va con él y el argentino logró con un único gol, alcanzar los 25 goles en un clásico (se ha convertido en el máximo anotador), los quince en lo que va de Liga y, decantar esa batalla individual que mantiene siempre con Cristiano siendo el máximo anotador en año natural con 54 dianas.
También ha logrado dejar atrás al Torpedo Muller, en un partido en el que no dejó a un lado su afán por hacer de este Barça un equipo coral. Le dejó pases de gol a medio equipo y se fue tras ver a Aleix Vidal cerrando un 0-3 definitivo tras darle un pase descalzo. Ahora, está por ver si el actual estado de forma de los azulgrana alcanza para poder competir a nivel continental, que es donde necesita definitivamente hacer mella a su auténtico rival.
Los catorce puntos sobre el Madrid con los que despide el año el conjunto de Ernesto Valverde son una auténtica salvajada y dan al Barcelona un respaldo moral notable de cara a los último cinco meses de competición. A saber, Valverde tiene su once tipo con el que parece capaz de todo y sus estrellas se bastan para resolver partidos. El colofón del Bernabéu ha sido el respaldo definitivo a un equipo que se despide del 2017 siendo el único de Primera que aún no ha perdido en lo que va de Liga.