Regresa Zach Monaghan, el faro del Leyma

Pablo Gómez Cundíns
pablo gómez A CORUÑA / LA VOZ

DEPORTES

EDUARDO PEREZ

El base norteamericano ficha de nuevo por el Básquet Coruña meses después de haberse ido a la liga de Bélgica

03 nov 2017 . Actualizado a las 20:33 h.

Vuelve el faro de Zach Monaghan (Palatine, Estados Unidos, 1992). El base de Illinois regresa al Leyma hasta el final de temporada después de haber dicho adiós al final de la pasada y enrolarse en las filas del Limburg United de la liga belga.

En veinticuatro horas, el conjunto naranja recibió dos impulsos anímicos importantes. El primero, la victoria en el derbi gallego ante el COB en Ourense (partido que se tuvo que aplazar por la rotura de una canasta). El segundo, con mucho más recorrido: el regreso de Monaghan.

El norteamericano estaba compitiendo hasta hace unos días en el Limburg, en el que promedió 8,5 puntos y 4,8 asistencias por partido, pero rescindió su contrato y decidió vivir una segunda etapa en A Coruña, donde jugó las dos últimas campañas.

Su presencia ha sido bien recibida tanto en el vestuario (ayer se repartían abrazos a la puerta del Palacio de los Deportes de Riazor como en pocas ocasiones se ha visto) como en el seno del cuerpo técnico, ya que las características del director de juego estadounidense se ajustan a las necesidades de equipo en estos momentos.

Monaghan podría debutar mañana mismo en el partido contra el Lleida (séptimo clasificado con tres victorias, una más que el Leyma), que comenzará a las ocho de la tarde en el Palacio de los Deportes de Riazor.

«Yo también estoy muy feliz. Fue poner un pie en A Coruña y ya tener buenas sensaciones», exclamaba ayer Monaghan en cuanto cruzó el umbral del acceso a Riazor. «He hablado con algunos de los compañeros que estaban en mi anterior etapa porque ya los considero viejos amigos, más que compañeros. Solo que ahora soy yo el novato en el vestuario je, je...», bromeaba.

«Las cosas no iban como yo quería en Bélgica, de modo de que me desvinculé del club y se abrieron varias posibilidades. Una, volver a casa a Estados Unidos con mi familia para esta temporada y después volver a emigrar. Pero realmente lo que yo quería era volver a A Coruña», relataba antes de ofrecer otro dato clave: «Mi novia vive aquí, y la ciudad es muy especial para mí. Si en alguna ocasión cree la gente que yo puedo ser especial, el sentimiento es mutuo». «Nunca sabes por dónde te lleva la vida y esto es una muestra de ello. Al final de la pasada temporada, decidí irme. Y ahora estoy aquí. Creo que saldrá todo bien», concluía.

Con todo, el jugador demostró estar al día de la trayectoria inicial del equipo en la presente temporada y se dio un tiempo para analizarla. «Trabajaré duro para ayudar. Sé de lo que son capaces estos jugadores. Si trabajamos duro. Todavía no hemos analizado la situación, solo hablo por lo que he podido ver desde Bélgica. Aún no hemos tenido tiempo de ello, pero lo tendremos», reflexionó.