No hay una fórmula única para triunfar y el ejemplo de excelencia de Federer y el español lo confirma
12 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Con su triunfo en Nueva York Rafa Nadal empata a dos títulos de Grand Slam con Roger Federer a lo largo de 2017. Tras su fantástica temporada, que ha acabado con todos los elogios, querría hacer hincapié en otros aspectos -además de romper récords, estadísticas, títulos-, que la trayectoria de ambos significan en el deporte.
Estereotipos
Ambos son una demostración de que no hay un solo camino, ni una técnica determinada, ni una preparación concreta para llegar a la cima. Federer y Nadal son la antítesis en multitud de facetas: Roger de complexión longilínea, Rafa musculado; el suizo con una técnica y una elegancia superlativas en todos sus golpes y movimientos, el español innovador en la mayoría de sus acciones, con un estilo, por ejemplo en el drive, que no se conocía hasta su aparición; el de Basilea poco dado a denotar su estado de ánimo, y el de Manacor expresivo y explosivo en sus acciones en la pista. En definitiva, una demostración de que no sirven los estereotipos.
Entornos
Ambos han tenido entornos ideales para desarrollar sus cualidades. El tío Toni y Mirka han sido decisivos en sus trayectorias. Hay que valorar la naturalidad y la estabilidad a lo largo del tiempo del equipo de Rafa, con la única incorporación de Carlos Moyá, que ya era como de la familia. El reconocimiento de Roland Garros y del US Open a la figura de Toni Nadal es un justísimo premio a una labor excepcional, torpemente cuestionada en algunos momentos bajos del balear.
En el caso de Federer, cuando conoció a Mirka ya tenía una extraordinaria técnica, pero su carácter y actitudes no le aseguraban un buen futuro entre los profesionales. Mirka, mucho más madura y conocedora de los entresijos del tenis, además de pareja, ejerció desde el principio de su relación como mánager del suizo, modelando su carácter, proporcionándole el equilibrio que necesitaba para desarrollar todo su talento. Y desde entonces aparte de la influencia de Edberg en su momento puntual, y la fidelidad permanente de Luthi, Mirka es la razón principal por la que Roger puede seguir a su edad compitiendo al máximo nivel con una familia de 4 hijos.
Deportividad y valores
Toni siempre educó a Rafa con la humildad por bandera. «Tú no te creas superior a nadie, que lo único que haces es jugar mejor al tenis». Dentro de la metodología peculiar, y efectiva al máximo, Toni puso las bases a un jugador que por encima de todo denota los mejores valores del deporte: humildad, superación, saber estar en la victoria y en la derrota, sinceridad, naturalidad. Además de una de las mentes más fuertes que se hayan visto en el deporte, (sino la que más), Nadal se hace admirar por todo el mundo. Aquella frase del tío Toni sirvió para su formación, pero hoy, con el paso de los años, tras cientos de partidos, se puede decir que Rafa no solo sabe jugar bien al tenis. Sabe transmitir la esencia del deporte. Ser el mejor amateur y el mejor profesional a la vez. Demostrar que se puede ser un campeón sin perder la compostura, sin romper raquetas, sin gestos antideportivos. Como hemos tenido la suerte de que su principal rival desde el 2004 une a su elegancia y técnica exquisita similar forma de entender el deporte, estaremos de acuerdo en que el legado que dejarán Nadal y Federer es excepcional.
La historia de mutua admiración con Tiger Woods
Durante días, un personaje ajeno al círculo de confianza de Rafa Nadal ocupó una butaca en su palco del estadio Arthur Ashe de Flushing Meadows. Tiger Woods, el genio que sumó 14 grandes antes de cumplir los 32 años, siguió atento los partidos del español. El atleta que revolucionó el golf, ahora con 41 años y apartado temporalmente del circuito por sus lesiones y su adicción a los medicamentos, apenas se comunicó con el equipo de Nadal. La relación es de mito a mito.
Nadal admira a Tiger como a un referente. «Hace años que tengo contacto con él, lo conocí en Shanghái, cuando lo fui a ver jugar. Personalmente, nunca tuve ídolos, pero lo más cercano a eso es él», expresó Nadal tras la final. «Su actitud en competición siempre fue fantástica y su manera de encarar los momentos complicados en un campo de golf a mí sí que me inspiran. A mí, que me gusta el golf, he visto cosas en él que no he visto en ningún otro», añadió el mallorquín, que en sus ratos libres ha construido un juego espectacular, con hándicap 2,8.
«Su determinación a la hora de pegar golpes importantes es distinta a cualquier otro jugador que yo haya visto. Para mí siempre ha sido una fuente de inspiración y ojalá lo pueda ver de nuevo compitiendo en los campos de golf pronto», destacó el número uno del mundo.
A pesar de las lesiones y los problemas extradeportivos de Woods en los últimos años, Nadal no cree que necesite reflejarse en él para superar los inconvenientes. «No creo que Tiger necesite ningún ejemplo», aseguró el campeón de 16 grand slams de tenis.