Una poderosa segunda manga alzó al lucense a lo más alto del podio en el Mundial MX2
11 sep 2017 . Actualizado a las 16:54 h.Jorge Prado ha vuelto a tocar el cielo en Assen. El piloto lucense no ha dicho su última palabra en el Mundial de motocrós de MX2 y, a solo dos pruebas para cerrar el calendario, dio ayer un golpe sobre la mesa en los Países Bajos. El de KTM escaló a lo más alto del podio tras una gran segunda manga, en la que superó al suizo Jeremy Seewer (Suzuki) que cruzó la meta pisándole los talones. Su compañero Paul Jonass, cayó a la séptima posición y tuvo que conformarse con la plata.
Especialista en la arena, Prado partía como uno de los favoritos en el circuito europeo, ubicado a poco más de dos horas de su casa en Bélgica. El gallego llegaba además con ganas de desquitarse de los problemas físicos que le hicieron retirarse en Florida la semana pasada. No defraudó, postulándose una vez más como el rey de este tipo de superficies.
«Escogí el interior de la pista y estaba mucho más húmedo que el exterior, con lo cual me adelantaron varios pilotos», dijo Jorge sobre la primera manga. Sin embargo, su talento sobre la arena le catapultó hasta la rueda del líder, su compañero Paul Jonass. Inició con él un pique amistoso en el que llegó a adelantarle para liderar la carreras durante algunas vueltas. Los dos habían recibido instrucciones de KTM para evitar incidentes y la disputa no fue agresiva, eso sí Jonass quiso demostrar con su victoria por qué es el primer piloto de la escudería, mientras Prado dejaba recado de sus intenciones.
Jorge arrancó tercero en la segunda fase, pero se situó rápidamente tras la estela del británico Conrad Mewse, a quien adelantaría en la quinta vuelta para ya liderar hasta la bandera de cuadros: «He preferido esperar un poco tras él y cuando se ha desgastado un poco he pasado y ya he podido rodar a mi ritmo y conseguir unos buenos segundos de ventaja sobre el grupo de detrás. Al final de la manga, con los doblados, se me ha acercado Seewer pero he apretado en uno de los tramos para entrar vencedor». Assen es una pista talismán para el piloto gallego, que consiguió su primer oro en su debut en el Europeo de 125 centímetros cúbicos hace ya dos años. El de ayer fue el tercero en la arena neerlandesa para su palmarés, tras conseguir en el 2016 el metal más valioso en otra prueba del MX2.
Prado suma con este tres oros en las 21 citas que van del calendario Mundial: Assen (Países Bajos), Pietramurata (Italia) y Lommel (Bélgica) figuran entre los triunfos del piloto lucense y ya son cinco las veces que se ha subido al cajón en esta edición. «Estoy feliz porque en mi primer año en el Mundial, en el año de aprendizaje, creo que están saliendo muy bien las cosas. Estoy muy agradecido a todos los que me apoyan y a quienes hacen posible esta victoria», valoraba. Solo quedan dos pruebas para que Prado trate de alcanzar el top cinco mundial. El circuito Villars sous Ecot francés será la penúltima parada, la semana que viene.
Ayer el también gallego Rubén Fernández consiguió puntuar en Assen con un decimoquinto puesto en la primera manga y un decimonoveno en la segunda. Otro español, Jorge Zaragoza, logró un punto al ser vigésimo en la segunda manga de MX2 y José Butrón en MX1, saliente de lesión, no pudo puntuar en una pista muy complicada.
El robo de la bicicleta
La jornada empezaba con disgusto para Jorge Prado. El lucense publicó en las redes sociales que alguien le había robado su bicicleta de montaña, una Specialized que desapareció del paddock de KTM en el circuito neerlandés. El podio le ayudó a olvidarse de todo, aunque Prado prometió una recompensa para quien le ayudase a recuperar la bici con la que entrena.