La temporada 17/18 de la Liga Endesa, que comenzará en apenas dos meses, se convertirá en la primera en la que los lanzamientos de tres que hagan los equipos participantes supongan más de un 40 % del total de los ensayos de campo que se intenten a lo largo de la competición. Es la conclusión lógica que se extrae si analizamos la tendencia en la utilización de este tipo de lanzamiento.
La línea de tres se instauró en la temporada 84/85 y aquel año apenas ocho de cada cien tiros intentados eran triples. La evolución ha ido en claro ascenso (únicamente frenado en la temporada 10/11, cuando se alejó la línea hasta el 6,75 actual), para acabar rondando el 40 % de triples intentados en la temporada 16/17 recién finalizada.
Este tipo de datos señalan claramente la importancia de la utilización del triple, y la temporada pasada nos ha dejado buenos ejemplos del rendimiento que se puede obtener de este lanzamiento.
De los diecisiete equipos participantes, seis obtuvieron más puntos por tiro lanzando de tres que de dos, es decir, a estos conjuntos (Tenerife, Murcia, Joventut, Bilbao, Málaga y Betis) les compensaba lanzar desde el triple y no desde otra posición del campo, ya que el premio obtenido era mayor.
Cinco de estos equipos cumplieron con creces los objetivos de la temporada, incluso dos de ellos obtuvieron plaza de play off y alcanzaron un título europeo (Tenerife y Málaga). El Betis, finalmente descendido de forma deportiva, no fue capaz de aprovechar esta circunstancia del juego.
La explicación la encontramos en la cantidad de tiros que cada uno de estos equipos absorbieron desde el triple. Si el premio por lanzar de tres es mayor que el obtenido de cualquier otro lanzamiento, parece lógico pensar que se gasten muchos tiros desde el triple. Así lo hicieron todos estos equipos excepto el Betis. De hecho, los andaluces desperdiciaron su buen rendimiento del tiro de tres gastando únicamente el 32 % de sus lanzamientos a canasta desde detrás de la línea de 6,75, mientras que en el caso de los otros cinco equipos este porcentaje se situó por encima del 40 %, convirtiéndose en un factor decisivo para cumplir con sus objetivos de la temporada.