La genial reacción de Carlsen

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EDUARDO MUNOZ ALVAREZ | AFP

El noruego cometió errores, pero se rehízo como un artista y va camino de ser el mejor de todos los tiempos

02 dic 2016 . Actualizado a las 11:37 h.

En este match hay que felicitar a los dos jugadores. Hubo muchos errores -como es normal en una competición con una tensión tan grande-, pero también detalles de auténticos campeones, los cuales no son válidos para el ajedrez, sino para cualquier tipo de deporte. 

Primero el aspirante. Jugó a la defensiva, sin duda. Muchos lo pueden llamar cobarde, pero en el último año ha demostrado que era su punto más fuerte y debía confiar en él. Además, la estrategia de jugar a la defensiva puede ser a la vez muy valiente. A nadie le gusta que durante el día alguien nos esté dando con un martillo en la cabeza, por mucho que tengamos un casco. Aguantar, aguantar y seguir aguantando está destinado a muy pocos y no hay que olvidar que se puso por delante en el match con esta estrategia. 

El campeón ha hecho un juego muy bueno, excepto cuando la ansiedad se apoderó de él. No ganó varias posiciones ganadas, algo inusual en él. Generalmente, cuando consigue una posición ganada, su porcentaje de victorias es sobre el 90 % (algo muy superior a la mayoría de los jugadores; por ejemplo, mi porcentaje como máximo llega al 70 %).

En este torneo, Carlsen tuvo 5 posiciones ganadas y solo pudo ganar dos (la última ronda no la cuento, ya que su rival tiene que arriesgar al máximo, y para él una derrota o un empate es lo mismo).

Sin embargo, el noruego ha demostrado muchas ideas en el aspecto técnico del juego pero, la más impresionante, ha sido la psicológica. Recuperarse como lo hizo de la derrota, las inteligentes tablas en la duodécima partida (independientemente de que fuera feo para los espectadores) y su compostura durante las rápidas hace que seguramente Carlsen sea el mejor jugador que ha habido en la historia del ajedrez. Los próximos enfrentamientos lo confirmarán.

Un cruce de estilos, partida a partida

Los desempates fueron de los más emocionantes que he vivido, teniendo en cuenta lo que se jugaban en cuatro partidas rápidas y lo vivido los días anteriores. 

Primera ronda

Calentamiento. Karjakin comenzó con blancas. Desde el punto de vista psicológico, creo que Carlsen estaba contento con esto. Karjakin no iba a jugar lo más agresivo posible desde el principio, ya que no lo hizo durante el match. Sin embargo, en un desempate corto a 4 partidas, puedes necesitar jugar a ganar con las piezas blancas (algo parecido a tener el saque en el tenis), ya que si pierdes una partida puedes estar contra las cuerdas inmediatamente. Así Carlsen podría «calentar». En la primera partida de los torneos no suele estar a su mejor nivel. 

La partida comenzó con 1.e4 (como casi todas las del match) y se desarrolló un juego muy tranquilo en el que no pasaba nada especial, con Karjakin con cierta iniciativa. En un momento, la estrategia salió a la luz y la posición se simplificó. El ruso ni siquiera pensó en la jugada crítica, simplemente se cambiaron todas las piezas. Una captura permitiendo el cambio de un alfil por un caballo permitía crear cierto desequilibrio en la posición y seguramente conseguir ventaja... Pero no lo hizo y tablas. 

Segunda ronda

Al borde del «knock out». La segunda partida fue una obra de arte del campeón. Muy parecida a la primera ronda del desempate, pero en un momento cambió el ritmo. En una posición igualada, empezó a ganar espacio en el flanco de dama con sus peones (algo así como avanzar las filas rápidamente en una batalla). En estas situaciones tienes dos opciones: esperar a que tu rival siga avanzando e iniciar un contraataque en el momento indicado, o ir a la batalla inmediatamente. Karjakin utilizó la primera estrategia todo el match, pero aquí luchó inmediatamente. Creo que se había cansado de esperar y el cansancio se hacía notar, mientras que Carlsen estaba realmente fresco. El contraataque inmediato de Karjakin se encontró con un sacrificio posicional de Carlsen, que el ruso no había prevenido. Y entonces, en vez de seguir en una lucha cuerpo a cuerpo, decidió asumir una posición peor pero con muchas opciones de tablas, debido a la creación de una fortaleza. Es decir, retirada y a las trincheras. 

Pero la defensa era muy difícil y poco a poco Carlsen asfixiaba a su oponente. El juego era ejemplar, las negras no se podían mover y solo quedaba el golpe de gracia, un jaque, atacar un peón y se acababa la partida... ¡Y el campeón no lo vio! Una obra de arte durante toda la partida y no ve una secuencia de jugadas que la mayoría de aficionados veía... Increíble, pero así suceden las cosas. Tablas. 

Tercera ronda

¿Pérdida del equilibrio o demostración de control? Antes de empezar la partida, pensé que el campeón no se recuperaría. Por tercera vez en el match, dejaba escapar una posición completamente ganada. Entre los jugadores de ajedrez es una de las situaciones que más ansiedad causa. Cuando tienes la recompensa al alcance de la mano y no eres capaz de alcanzarla. Además, el aspirante está contento. Piensa: «No he perdido ahora, parece que la suerte está de mi lado». 

La partida parecía una copia de la primera, todo muy tranquilo y tablas. Pero un sacrificio de peón típico de Carlsen lo cambió todo. Dejaba a las blancas en una posición defendible, pero si tienes mucho tiempo en el reloj. En el instante del sacrificio Karjakin tenía sobre 2 minutos, lo cual era muy poco tiempo. Con 15 segundos cometió un error grave y el campeón se adelantó en el marcador por primera vez en 15 rondas. 

Cuarta ronda

¿Qué hará el aspirante? Siempre pensé que si Carlsen hubiera ganado alguna de las partidas anteriores, sería muy difícil ver la reacción de Karjakin. Como cuando el Barcelona va ganando y se pone a tocar. Karjakin eligió la variante Siciliana con el peón de rey. La idea de esta variante es cambiar un peón lateral por uno central y así tener más control con tus peones en el centro del tablero. La opción era interesante, pero el campeón eligió una variante supersólida olvidada por mucho tiempo, que en los últimos años solo empleamos algunos jugadores rusos y un servidor (tres veces). Carlsen no experimentó ningún tipo de problemas en la posición. En un momento, Karjakin sacrificó material para intentar complicar las cosas, pero no fue suficiente y lo único que consiguió fue recibir jaque mate.

Iván Salgado es gran maestro internacional de ajedrez