Ganador del oro olímpico en Río y de Wimbledon, Murray se marchó de Nueva York sin reproches: «No he decepcionado a nadie. Luché tan duro como pude y di todo lo que tenía. Aprenderé de este partido».
El escocés buscaba convertirse en el cuarto jugador de la historia en alcanzar la final de los cuatro grandes en una misma temporada después de Djokovic, Roger Federer y Rod Laver. Un inspirado Nishikori frenó su camino y ahora aspira a volver a jugar la final que alcanzó en el 2014 en Nueva York, cuando perdió ante Marin Cilic.