Carolina Marín: «No sé si las rivales me tienen miedo, pero sí ganas de vencerme»

Javier Bragado

DEPORTES

FERNANDO BIZERRA JR | efe

La bicampeona del mundo de bádminton anuncia novedades en su estilo de cara a la cita olímpica en Brasil

09 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Carolina Marín (Huelva, 15-6-1993) posee una mentalidad férrea y la mejor zurda del bádminton. Atrás queda aquella niña a la que tenían que llamar por los altavoces de El Corte Inglés cuando se escapaba de su madre.

-La trayectoria junto a su entrenador siempre ha estado asociada a la innovación. ¿Qué ha preparado para Río 2016?

-Cambios en particular no te puedo contar porque los vamos a hacer en los Juegos, pero sí que los hemos hecho en la preparación física y en cuanto al estilo con el que voy a innovar.

-Hay que cambiar porque a usted ya la conocen mucho.

-Efectivamente. En los eventos importantes hemos llevado siempre a cabo un cambio para sorprender.

-Uno de los ejercicios para su preparación suele consistir en un duelo virtual contra sí misma.

-No me gustaría enfrentarme a Carolina Marín por la agresividad que muestra en la pista y por lo competitiva que es.

-¿Recuerda el momento en que cambió su carrera deportiva?

-Fue, si no recuerdo mal, en 2013. Fue un torneo en Madrid y perdí en la final contra mi compañera Beatriz Corrales. Nunca había perdido contra ella y ese partido lo perdí justamente. Me hizo ver las cosas de mejor manera y me hizo espabilar. Para llegar a conseguir lo que quería, tenía que dar un cambio brutal.

-Otro punto fundamental sería el día que derrotó a una jugadora china.

-El primer día que gané a una china fue en el Campeonato del Mundo de 2014 que gané. Fue en segunda ronda y me había ganado en el último torneo en semifinales. La teníamos estudiada de arriba a abajo y eso me impulsó a darme más confianza para las siguientes rondas.

-¿Observa más miedo en la rivales desde que es campeona?

-No sé si las rivales me tienen miedo, pero sí ganas de vencerme. Que de repente aparezca una española de la nada... Me tienen muy bien estudiada.

-¿Podría elegir sus mejores partidos?

-La final de 2014 fue muy importante, la visualizo muchas veces porque de una situación tan difícil, de repente, dar la vuelta a todo y cambiar y luchar aun estando reventada y sin fuerzas... Es lo que motiva.

-Su técnico, Fernando Navarro, la coloca en la recta de 100 metros de la pista de atletismo para formar una metáfora de la situación de su carrera. ¿Dónde está ahora?

-Estamos a 10 metros de la meta. Eran unos Juegos Olímpicos. Nos pusimos después de Londres a principio de la recta.

«Hasta el día que me retire de jugar al bádminton, no seré consciente de todo lo que he hecho»

La experiencia de los Juegos Olímpicos es imborrable para los deportistas. También para Carolina Marín, que podrá estar cerca de alguno de sus ídolos.

-¿Tiene ganas de ver a Rafael Nadal en Río?

-No me gusta incordiar nada a nadie, pero sé que por la villa me lo encontraré. Seguramente hablaremos, porque ya nos hemos encontrado otras veces y hemos hablado, pero al final es uno más entre todo el equipo. Me hace mucha ilusión encontrarme con otros deportistas.

-Bueno, usted es otra estrella.

-Yo no lo sé (suelta una carcajada).

-Pero es un ejemplo, pionera que señalan otros deportistas.

-Todavía no soy consciente de eso. Hasta el día que me retire de jugar al bádminton no seré consciente de todo lo que he hecho. Yo me sorprendo por gente que ha ganado un Campeonato de España o por ejemplo, Bruno Hortelano, que era algo muy complicado y era un Campeonato de Europa. Yo he ganado dos Mundiales, pero no sé. Al final, uno no es tan consciente y le da más valor a otros deportistas.

-Por cierto, asegura usted que cuando era pequeña era muy «pillina». Cómo ha cambiado la cosa.

-La vida cambia, la vida cambia (ríe)... Es lo que tiene también independizarse desde muy pequeña, con 14 años.. Ya llevo en Madrid nueve años y sola, por así decirlo. La vida te da muchas vueltas y maduras tú sola.

-Si no, no habría sido campeona del mundo.

-Bueno, eso nunca se sabe (se ríe).

El camino empieza pasado mañana ante la finlandesa Vainio

Carolina Marín es, sobre el papel, una de las principales bazas de la delegación española para colgarse una medalla en los Juegos. La andaluza debutará pasado mañana ante la finlandesa Vainio (16.55 horas). Bicampeona de Europa y del mundo, la jugadora aspira a conquistar el último gran título que le falta. Para ello, deberá mejorar la actuación que firmó en Londres, cuando fue apeada de la competición en la primera ronda.

Carolina Marín, que ya se entrena en tierras brasileñas, afirmó ayer que se encuentra en el mejor momento de su carrera. Solo falta demostrarlo.