El campeón de la Copa del Mundo afronta hoy la ronda que fija los cruces eliminatorios
05 ago 2016 . Actualizado a las 13:28 h.El despertador volverá a sonar temprano en la habitación de Miguel Alvariño, el noveno arquero del ránking mundial. Se levantará una hora antes de lo habitual en su semana de aclimatación a Río. Así que se pondrá en pie a las cinco de la madrugada (11 en España). Desayuno a las cinco y media, salida en autobús a las seis y llegada al Sambódromo Marqués de Sapucaí algo después de las siete. A las nueve compite. «Ya tengo ganas de que empiece y disfrutar, aunque hacerlo en una competición de tanta trascendencia es muy difícil», reflexiona el deportista pontés, de 22 años y vigente campeón de la final de la Copa del Mundo. Hoy afronta la ronda de clasificación. Dos series de 36 flechas desde 70 metros de distancia. Al terminar, el resultado de cada arquero establecerá los cruces de los 64 participantes en las eliminatorias que empiezan el próximo lunes. Y también se fijará el cuadro de los doce países que mañana se lo jugarán todo por equipos, con los cuatro mejores exentos de los octavos.
«Normalmente en la ronda clasificatoria voy cogiendo sensaciones para las eliminatorias. De menos a más. Aunque me gustaría hacerlo bien para poder asegurarme un cruce más asequible», explica Alvariño, que se crece en las eliminatorias, los duelos cara a cara. En la jornada de hoy, sobre 720 puntos posibles, daría por bueno un resultado por encima de los 660, y consideraría óptimo uno que ronde los 680 o le acerque a su récord de España, que fijó en 684 durante la Copa del Mundo de Antalya (Turquía) del 2016. Con estos últimos registros, debería ganarse un lugar entre los cinco primeros cabezas de serie. Aunque también depende del nivel del resto.
Los nervios empiezan a cosquillear a Alvariño, que tendrá una ronda de clasificación muy tensa. Porque tira sobre la misma diana que el brasileño Bernardo Oliveira y el coreano Ku Bonchan, segundo del ránking mundial. «Va a haber un montón de cámaras pendientes. A ver como lo manejo», explica. Aunque tiene experiencia ante miles de personas, como cuando ganó en el Zócalo de México el oro de la Copa del Mundo.
Después de varios días de rodaje en el Sambódromo, bajo el machacón ritmo del seleccionador, Hyung Mok Cho, todo está listo. El único cambio respecto a los otros escenarios donde tira es la parafernalia olímpica, que deja «un espacio precioso».
Los puntos de Alvariño, Juan Ignacio Rodríguez y Antonio Fernández Yiyo determinarán también el cuadro al que se enfrenten mañana. «Hay que ser realistas, si tiramos los tres muy bien, podemos estar entre el puesto sexto y décimo entre los 12», reflexiona el deportista pontés. El puesto directo en cuartos parece muy caro. Pero las eliminatorias de mañana, con otro formato diferente, se abren a más sorpresas. El momento del equipo español.