Estas acusaciones ya fueron rechazadas en su momento por el ministro de Deportes ruso, Vitali Mutkó, y por el Kremlin, que han denunciado una campaña política para dejar a Rusia sin los Juegos de Río. Este informe es en lo que se basaron los directores de la Agencia Estadounidense Antidopaje (USADA), Travis Tygart, y de la Canadiense (CCES), Paul Melia, para pedir al presidente del COI, el alemán Thomas Bach, la exclusión de Rusia de los Juegos. Según Tygart y Melia, las investigaciones de McLaren confirman «un patrón impactante de dopaje a largo plazo, sistemático y promovido por el Estado y una interferencia por parte de Rusia a los procedimientos antidopaje».
643 resultados desaparecidos
En total, más de 643 pruebas de atletas rusos que dieron positivo entre el 2012 y el 2015 en los laboratorios de Moscú y Sochi «desaparecieron» y luego dieron negativo, según denunció la AMA en su explosivo informe. Los 643 casos, sin embargo, son sólo una cifra «de mínima», de acuerdo al informe de 97 páginas presentado en Toronto, ya que todavía no se tuvo acceso a la totalidad de la información.