Frank Casañas logra la mínima en disco para sus quintos Juegos Olímpicos

Frank Casañas, discóbolo cubano nacionalizado español y con licencia por la Federación Galega de Atletismo firmó una marca de 65,32 metros en la tarde de ayer en una reunión en Castellón y podrá disfrutar de sus quintos Juegos Olímpicos, los terceros como atleta español, ya que en Sídney y en Atenas lo hizo bajo la bandera de Cuba y en Pekín y Londres ya había participado como español.

Frank, de 37 años, confesó que lo había pasado mal. «Ha sido la clasificación más difícil de mi vida. Venía de la lesión del año pasado y no terminaba de encontrarme bien. La verdad es que he sufrido mucho, pero al final conseguí el objetivo», comentaba a La Voz poco después de conseguir la marca mínima que solicitaba la federación española para los Juegos (65 metros). «Además -explicaba- esta vez han pedido más que nunca. Antes pedían 63 metros y ahora había que lanzar más de 65».

Buenas sensaciones

Al margen del registro conseguido el lanzador del Playas de Castellón tuvo buenas sensaciones, cuestión que le anima a tomar parte en el Campeonato de Europa absoluto que la próxima semana se celebra en Holanda. «Voy a ir. Este año todavía no he tomado parte en ninguna competición internacional (era un asiduo de la Liga de Diamantes) y pienso que este es un buen momento para estrenarme. Me siento bien y me servirá como preparación para los Juegos».

Con un diploma olímpico (quinto en Pekín) en su libro de éxitos, Casañas no quiere ir a Río de Janeiro como comparsa, sino que lo hará con la intención de meterse en la final y buscarse un hueco entre los mejores.

Frank tuvo su irrupción en el mundial júnior de 1996 cuando se hizo con la medalla de bronce. Como sénior, además de su éxito olímpico del año 2008 destaca el primer puesto conseguido en la Copa de Europa de lanzamientos de Leiria (Portugal) en el 2009.

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