La lesión de Curry queda en un susto y estará de baja dos semanas

M. P. R. LA VOZ / REDACCIÓN

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Curry, en el partido del domingo antes de lesionarse
Curry, en el partido del domingo antes de lesionarse LARRY W. SMITH | Efe

La resonancia magnética confirma un esguince de rodilla pero descarta una lesión mayor

25 abr 2016 . Actualizado a las 21:28 h.

Stephen Curry volvió a jugar la noche del domingo después de perderse el segundo y el tercer partido de la eliminatoria de play offs contra los Houston Rockets. Pero en la última jugada del segundo cuarto, la gran estrella de los Golden State Warriors sufrió un problema físico aún mayor, una lesión que deja a la NBA temblando ante la incertidumbre de perder a su referente actual, y al equipo que logró el récord de victorias histórico en la temporada regular pendiente de un hilo en la búsqueda del segundo anillo de campeón consecutivo. Al final, la resonancia magnética a la que se sometió este lunes permitió a los Warriors y a la Liga respirar tranquilo: la prueba descartó daños mayores que un esguince de rodilla grado 1.

Curry sufrió el percance en la última jugada del primer tiempo, cuando un resbalón persiguiendo a Trevor Ariza le hizo doblar en exceso la pierna derecha y abrir hasta el límite de lo posible la izquierda. La hiperextensión le hizo llevarse la mano de inmediato a la rodilla derecha. Curry se fue al vestuario con el resto de compañeros y, tras el descanso, saltó a la cancha para probarse. Pero no fue capaz de iniciar el tercer período y, tras ser examinado en los vestuarios, se confirmó un esguince de rodilla cuya gravedad se desconoce.

La lesión de Curry no impidió a Golden State Warriors ganar el cuarto partido de la serie contra los Rockets de manera contundente (121-94). Después de llegar al descanso igualados 56-56, los Warriors rompieron el partido ya sin su gran estrella, con un tercer cuarto apabullante liderado por los triples de Klay Thompson (4 en ese período) y Draymond Green.

Los Warriors podrán sentenciar la serie el próximo miércoles. Curry había jugado hasta el momento de su lesión 19 minutos, con sólo 6 puntos y 2/9 en tiros (1/7 en triples). El base estrella de los Warriors se había perdido los dos partidos anteriores por molestias en el tobillo derecho, en los que su equipo ganó uno y perdió el otro.  «Si no hay ningún cambio de cara al calentamiento previo al partido, pienso que estoy listo para jugar y, sobre todo, hacerlo con intensidad desde el inicio que es lo que necesita el equipo», dijo antes de jugar esta noche.

Curry, actual campeón de la NBA y jugador más valioso la pasada temporada y candidato indiscutible para revalidar esa condición este año, tuvo serios problemas de tobillo en el pasado, que llegaron a poner en duda su valía como jugador de élite en la máxima competición de baloncesto del mundo. Esta temporada ha promediado 30 puntos por partido para los Warriors, que vencieron 73 partidos de 82 en la Liga, récord histórico por encima de la marca de los Bulls en 1996.