El español superó en algo más de siete décimas de segundo a su inmediato perseguidor, el italiano Andrea Iannone
09 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.El español Marc Márquez (Repsol Honda RC 213 V) no hizo ayer más que cumplir con lo que decían todas las previsiones y sentenció con claridad la primera jornada de entrenamientos libres del Gran Premio de las Américas de MotoGP. Márquez superó en algo más de siete décimas de segundo a su inmediato perseguidor, el italiano Andrea Iannone (Ducati Desmosedici GP16) y en casi nueve al español Maverick Viñales (Suzuki GSX-RR), tercero, todavía con margen de mejora, ya que su tiempo de 2.04,034 se encuentra lejos de su mejor vuelta rápida, establecida en el 2015, cuando tras apoyar la moto en el muro y regresar corriendo a su taller fue capaz de «volar» para establecer un nuevo récord de 2.02,135.
Aunque Márquez comenzó siendo el líder de la segunda tanda de entrenamientos, como era previsible, dos vueltas más tarde de que lo consiguiese, en el quinto giro, el italiano Valentino Rossi se puso al frente de la clasificación con un registro de 2.05,088, alrededor de dos décimas de segundo más rápido que su compatriota Andrea Iannone y el español del equipo Repsol Honda.
Caída del de Honda
Por entonces, con media hora de entrenamiento todavía por delante, Jorge Lorenzo estaba quinto, pero prácticamente en esos instantes todo cambió, primero al colocarse líder el representante de Yamaha y vigente campeón del mundo (2.04,966) y casi de inmediato le superó Márquez, quien rodó en 2.04,560, unas cuatro décimas de segundo más rápido que su oponente poco antes de irse al suelo.
No tardó demasiado Márquez en volver con su moto, equipada con unos alerones algo más grandes que los que lució en Argentina, para culminar los entrenamientos, unas pruebas en las que a la búsqueda de arañar una milésima de segundo, fueron muchos los pilotos que tuvieron que rectificar su trayectoria. En el undécimo giro, Márquez puso el 2.04,034.