Djokovic, una raqueta casi invencible

Paulo Alonso Lois
P. ALONSO LOIS REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

MATTHEW STOCKMAN / Afp

 El serbio gana en Miami ante Nishikori y estira una superioridad no vista durante décadas

04 abr 2016 . Actualizado a las 11:18 h.

Ningún deportista es invencible, pero en las últimas décadas el tenis no ha vivido una época de tanta superioridad como la que protagoniza Novak Djokovic, que ayer celebró la victoria de Miami tras superar al japonés Kei Nishikori por 6-3 y 6-3. Su tiranía quizá terminará más pronto que tarde dada la elevada exigencia en lo alto del circuito mundial, pero arroja números de gigante. Su sexto triunfo en Florida (marca histórica que comparte ahora con Andre Agassi) entierra el récord anterior de títulos de categoría Masters 1.000, que tenía Rafa Nadal. Ahora el balcánico posee 28.

La versatilidad de Djokovic, que se proclamó campeón en Miami sin ceder ni un solo set, le permite triunfar sobre todas las superficies, aunque todavía le falte un título en la tierra de Roland Garros. Por eso cerró el 2015 con un balance de 82 triunfos y seis derrotas, un insultante 93% de victorias. Ha hecho de la victoria una rutina. Este año lleva con cuatro títulos y una única derrota por retirada en los cuartos de final de Dubái ante Feliciano López. Abandonó por problemas en un ojo. Un balance de 28 victorias y una derrota que le da un 97% de partidos ganados desde enero.

Más puntos que nadie

Aunque en el debate sobre quién es el mejor tenista de la historia, Roger Federer o Rod Laver se encuentren por encima de Djokovic, varios datos confirman al serbio como el tenista con mayor dominio en una época concreta durante los últimos tiempos. Desde que se creó el ránking actual de la ATP, ningún jugador había terminado el año con tal cantidad de puntos como la que mostró al cierre del 2015: 16.585. Y jamás un tenista había alcanzado los 16.790 que lució el pasado mes de enero el balcánico. Djokovic tiene sus duelos particulares a favor con todos los jugadores actuales del top-10. Otra muesca de su jerarquía.

¿Y ahora? Ya tiene cuatro títulos en el 2016, incluidos el único grand slam, Australia, y los dos Masters 1.000, Indian Wells y Miami. Consumida la gira americana de pista dura, el serbio reaparecerá en la tierra de Montecarlo, en un calendario que le llevará por Madrid -donde no juega desde hace tres años-, Roma y Roland Garros. En París persigue el título que complete sus cuatro paradas del Grand Slam a lo largo de su carrera.

Desde hoy, la mente en París

Djokovic tiene recursos y experiencia para ganar en París. Su superioridad reciente en tierra también se encuentra fuera de toda duda, aunque Rafa Nadal tenga registros históricos inalcanzables. Pero el desgaste mental al que se enfrenta cada año al acudir a París con el peso de afrontar su único reto pendiente puede pesar más que todos los números que tiene a sus espaldas. Mientras, el tenis debate como podrá aparecer un tenista capaz de hacerle frente, con Rafa Nadal en el diván, Roger Federer en un delicioso crepúsculo y Andy Murray lastrado por la irregularidad.