Recibe en el Palacio municipal de los deportes de Riazor al Barça, con la misión suicida de darle la vuelta a un 6-0 adverso
02 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.El Hockey Club Liceo se ha caracterizado durante décadas por hacer frente a retos memorables. Principalmente al ganar muchos títulos pese a contar con muchos menos recursos que el gigante Barça. El sueño cumplido de un colegio frente a un imperio.
Sin embargo, lo de esta tarde (16.45 horas) sería el «no va más». Podría ser antológico. Es un reto al filo de lo imposible. Recibe en el Palacio municipal de los deportes de Riazor al Barça, con la misión suicida de tener que remontar un 6-0 adverso para clasificarse para la final a cuatro de la Copa de Europa de hockey sobre patines.
Mala suerte
El camino hasta este partido de vuelta de los cuartos de final fue casi perfecto para el cuadro liceísta. Pero tuvo la mala fortuna de tener que cruzarse ahora con el cuadro catalán, considerado como el conjunto más poderoso del mundo.
El equipo de Carlos Gil acabó la primera fase como primero de grupo, cediendo un único encuentro ante el Oliveirense portugués (4-2). En A Coruña le devolvieron la moneda a los lusos (5-3), añadiendo además dobles triunfos sobre el Basilea suizo (3-5 y 13-1) y el Viareggio italiano (7-2 y 2-5).
En cualquier otra temporada, el Liceo hubiera evitado el Barça en cuartos; pero justamente esta campaña el cuadro azulgrana pinchó en su grupo y solo pudo ser segundo tras el Oporto. Los portugueses les ganaron los dos partidos por 1-0 y 1-2.
6-0 en la ida
En el encuentro de ida de los cuartos, el Liceo sufrió un duro correctivo en el Palau Blaugrana (6-0). Tres goles de Pablo Álvarez (minutos 9, 11 y 50) allanaron el camino. Panadero, Lucas Ordóñez (de falta directa) y Matías Pascual completaron la goleada.