El expresidente de la Conmebol acusa al hijo de Villar de extorsión

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DEPORTES

Eugenio Figueredo señaló «a los diez presidentes de las asociaciones nacionales de Sudamérica» como receptores de dinero ilegal

26 dic 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El ex presidente de la Conmebol, Eugenio Figueredo, acusó al español Gorka Villar de extorsionar a clubes uruguayos que hace dos años denunciaron al ente rector, afirmó en Montevideo Pablo Barreiro, abogado del sindicato de futbolistas profesionales de Uruguay.

Al salir de la audiencia en la que Figueredo declaró ante una jueza de la capital uruguaya, al atardecer del jueves, Barreiro reveló que el dirigente uruguayo, también ex vicepresidente de la FIFA, señaló «a los diez presidentes de las asociaciones nacionales de Sudamérica», como receptores de dinero ilegal.

Figueredo dedicó «un capítulo especial a Gorka Villar por el papel extorsivo determinante hacia los clubes uruguayos para que retiraran esta denuncia que hoy prosperó», dijo Barreiro. Gorka Villar, hijo del presidente de la federación española y, en los hechos, jefe de la UEFA, Ángel María Villar, se desempeña como director general del organismo sudamericano.

El abogado de los futbolistas se refiere a Peñarol, Miramar Misiones, El Tanque Sisley, Juventud, Cerro Largo, Cerro, Rentistas y Racing, que iniciaron la demanda en diciembre del 2013 junto con el sindicato de futbolistas, pero después se retiraron ante las amenazas de suspensión a nivel internacional, formuladas desde Conmebol.

Los futbolistas la mantuvieron y dos años después lograron que Figueredo fuera procesado y enviado a la cárcel, tras ser extraditado desde Suiza, donde estuvo detenido desde fines de mayo por otra investigación que inició la Justicia de Estados Unidos.

De acuerdo a la versión de Barreiro, Figueredo incluyó en la lista de dirigentes que recibieron dinero a su compatriota Sebastián Bauzá, ex presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) entre el 2009 y el 2014, quien hasta ahora estaba libre de culpas y no había sido mencionado tampoco en las investigaciones de la Justicia estadounidense.

«No sé qué grado de veracidad hay, pero Figueredo mencionó a los 10 integrantes de la Conmebol como receptores de dinero», indicó el abogado de los futbolistas profesionales de Uruguay.

También Figueredo «mencionó el recibo de dinero de empresas y por diferentes medios y las inversiones que realizaba, pero eran todos elementos que ya se manejaban», por lo cual no hubo nada nuevo en este sentido.

Figueredo «hizo un análisis de cómo funcionaba la operativa» de corrupción a nivel de la Conmebol, y la Justicia decidió que eran elementos suficientes como para iniciarle un proceso y enviarlo a la cárcel, indicó Barreiro.

El abogado destacó que el exdirigente uruguayo, de 83 años, exhibió «mucha lucidez y desarrolló cada uno de los puntos con naturalidad y claridad», aunque la abogada de Figueredo, Karen Pintos, afirmó que el estado de salud de su defensor es «delicado». Figueredo «no habló de sobornos pese a que la situación se puede definir como recibo de coimas».