Bea Gómez no participó en todas las pruebas en las que se había inscrito por no encontrarse al 100 por cien
30 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Es el comienzo de una temporada especial. De una campaña en la que en el horizonte se vislumbran unos Juegos Olímpicos, la cita en la que la natación, de pronto, pasa de papel secundario a protagonista de lujo. Para la ribeirense María Vilas y el ferrolano Marcos García, dos de los integrantes del grupo de élite en Galicia, el viaje a Río parece complejo. Pero los caminos del deporte son indescifrables. Y en el Campeonato de España Open de Primavera que se celebra en marzo se abre la última ventana hacia Brasil. Mientras tanto, en el nacional de piscina corta que se disputó este fin de semana en Gijón, Vilas y García siguen acumulando metros en sus brazos. Y medallas. Mientras la medio fondista se marchó de las instalaciones del club Santa Olaya con tres: la plata en los 1.500 libre de la jornada inaugural, y los bronces de los 400 y 800 libre, el velocista firmó otros dos terceros puestos: en los 100 metros estilos y en los 50 mariposa. Todo sin grandes marcas, casi al ralentí. Los músculos aún están pesados. Es el inicio de la temporada.
Bea Gómez, baja de última hora
Después de quedar tercera en los 1.500, Bea Gómez apenas volvió a tocar el agua. No se encontraba al cien por cien y finalmente no participó en todas las pruebas donde se había inscrito. Para ella, es un año en el que deberá recuperar sensaciones.