Seis granates con cuatro amarillas

Roi Palmás
roi palmás PONTEVEDRA / LA VOZ

DEPORTES

Los centrales Campillo, Capi y Pablo, los mediocentros Jacobo y Tubo y el ariete Jorge Rodríguez están al borde de la suspensión con el play-off a la vista

23 abr 2015 . Actualizado a las 13:53 h.

En la guerra todo vale y en una fase de ascenso, más. Y es que hay que tener previstas todas y cada una de las variables que puedan afectar al rendimiento del equipo en el trascendental desenlace de todo un curso jugado a una sola carta. Uno de esos factores que puede marcar el devenir del club es el capítulo de sanciones de hombres determinantes. Luisito maneja con tiento un grupo en el que media docena de hombres de peso en su esquema tienen la espada de Damocles sobre su cabeza, en lo que a sanciones se refiere.

Tres de los cuatro centrales puros con los que cuenta el vestuario (Campillo, Capi y Pablo) están en capilla. Esa demarcación es una de las más sensibles a la hora de recibir sanciones. De hecho, Pablo acumula ya 9 tarjetas y está a punto de completar su segundo ciclo en el presente campeonato. Sus dos compañeros de eje han sido expulsados una vez por doble amonestación y vuelven a estar a un solo paso de perderse un encuentro.

En la línea de creación, Tubo está en la misma tesitura y Jacobo veía otra amarilla el pasado fin de semana, la cuarta en su haber. Ambos están también pendientes de ver, o no ver, la quinta cartulina, que les obligaría a presenciar un encuentro desde la grada. Y finalmente, Jorge Rodríguez, podría dejar desguarnecida la delantera durante un compromiso liguero si ve una amonestación más.

El entrenador tiene que lidiar con las especificidades de cada rival, con el capítulo de altas y bajas médicas y ahora también con los jugadores apercibidos, ya que en caso de que dos o más de sus efectivos sean amonestados, generarán otras tantas bajas obligatorias para el siguiente compromiso, algo que teniendo en cuenta cómo están las cosas en la clasificación, no es un tema menor.

La hora de la purga de tarjetas

El sistema de competición de Tercera no permite acceder a su fase decisiva, la del play-off de ascenso a Segunda B, limpio de amonestaciones. Por ello, en los próximos cuatro encuentros sería conveniente que la media docena de apercibidos viesen la quinta tarjeta, cumpliesen su partido de sanción, y accediesen a la ronda final por el ascenso sin las preocupaciones de perderse alguno de los choques decisivos.

Evidentemente, para que la jugada sea redonda, habría que asegurar el primer puesto de la competición de manera matemática a la mayor brevedad posible, dejando el último envite liguero, el que se disputará en Pasarón ante el Cerceda con todo resuelto para poder cumplir sanción cómodamente y guardar a los jugadores en un duelo que podría ser a tumba abierta entre el primero y el tercero de la tabla, en caso de no haberse resuelto todo con anterioridad.